La Ilustración: Un Movimiento Intelectual y Cultural
La Ilustración es un movimiento intelectual y cultural que surge en el siglo XVIII. Se caracteriza por una mentalidad racionalista. La razón es sinónimo de todas las fuerzas espirituales fundamentales independientes y sus logros contribuyen al bienestar de los individuos y al progreso social. Kant, referente de la Ilustración, afirma que la razón es suficiente en sí y por sí misma. Sus límites serán dados por su propia naturaleza. Así, sostendrá que la razón es universal. Para los ilustrados, es también autónoma y crítica contra los prejuicios, la tradición, la autoridad externa, la superstición y la idolatría. Por último, se trataría del instrumento para conocer e interpretar el mundo, así como para ejercer la crítica. Es analítica, capaz de analizar racionalmente los datos empíricos para conocer la realidad.
La Ilustración tiene una concepción secularizada de la razón. Esta interpretará las principales cuestiones de la teología cristiana. Frente al teocentrismo, será la naturaleza la que constituirá el centro de análisis de la realidad. Frente a la noción de providencia divina, se mantendrá la fe en el proceso de la razón y la humanidad. Frente a la redención sobrenatural, interpretan la salvación en términos de redención.
Según Hegel, los principales temas que se tratarán en la Ilustración son la naturaleza física y las leyes que la rigen (uso de la razón para conocer), el deísmo y la religión natural (sentido de la fe y Dios), la sociedad y la historia (organización de la sociedad). Sobre este último tema se desarrollan Teorías del Estado moderno: el contrato entendido como sumisión (Hobbes), el contrato liberal (Locke) y el contrato social (Rousseau).
La Ilustración es un movimiento intelectual y cultural que surge en el siglo XVIII. Se caracteriza por una mentalidad racionalista. La razón es sinónimo de todas las fuerzas espirituales fundamentales independientes y sus logros contribuyen al bienestar de los individuos y al progreso social. Kant, referente de la Ilustración, afirma que la razón es suficiente en sí y por sí misma. Sus límites serán dados por su propia naturaleza. Así, sostendrá que la razón es universal. Para los ilustrados, es también autónoma y crítica contra los prejuicios, la tradición, la autoridad externa, la superstición y la idolatría. Por último, se trataría del instrumento para conocer e interpretar el mundo, así como para ejercer la crítica. Es analítica, capaz de analizar racionalmente los datos empíricos para conocer la realidad.
La Ilustración tiene una concepción secularizada de la razón. Esta interpretará las principales cuestiones de la teología cristiana. Frente al teocentrismo, será la naturaleza la que constituirá el centro de análisis de la realidad. Frente a la noción de providencia divina, se mantendrá la fe en el proceso de la razón y la humanidad. Frente a la redención sobrenatural, interpretan la salvación en términos de redención.
Según Hegel, los principales temas que se tratarán en la Ilustración son la naturaleza física y las leyes que la rigen (uso de la razón para conocer), el deísmo y la religión natural (sentido de la fe y Dios), la sociedad y la historia (organización de la sociedad). Sobre este último tema se desarrollan Teorías del Estado moderno: el contrato entendido como sumisión (Hobbes), el contrato liberal (Locke) y el contrato social (Rousseau).
Ilustración: Movimiento intelectual y cultural del siglo XVIII que se desarrolla en el contexto de las revoluciones liberales burguesas. Busca reformas y libertad para el pueblo civil. Para Kant, consiste en que el hombre piense por sí mismo para normas morales universales, se necesita que el estado garantice la libertad del uso público de la razón. El lema de Kant de la Ilustración “Sapere Aude” está recogido de Horacio. En cambio, para Thoreau esta autonomía se alcanzará cuando uno se libera de las ataduras del estado.
Libertad: La libertad es el derecho que tienen las personas para decidir y elegir de manera responsable su forma de actuar dentro de una sociedad. Para Kant es uno de los postulados de la ética, junto al alma y Dios. Aplicarla implica que se puede elegir moralmente cómo actuar sin tener en cuenta nuestras afecciones o deseos. Además, el estado debería garantizar la libertad del uso público de la razón (Libertad de expresión y de conciencia) para asegurar la Ilustración. Para San Agustín, la libertad es el actuar de manera correcta con la ayuda de la gracia divina y el libre albedrío, por voluntad propia.
Mayoría de edad: La edad impuesta legalmente en la que se alcanza la adultez. Según Kant se alcanza cuando se logra la autonomía racional y la capacidad crítica, tanto para entender los propios límites del conocimiento, como para construir sus normas éticas universales al margen de elementos externos a la razón. En cambio, según San Agustín de Hipona, es necesario unir la razón y la fe para alcanzar la verdad y así pensar de forma correcta.
Minoría de edad: La minoría de edad es el estado en el cual una persona no es capaz de pensar por sí misma y requiere de la guía de un tutor para tomar sus propias decisiones. Según Kant, significa no tener la capacidad de servirse de los propios razonamientos sin que otra persona intervenga. En cambio, Platón dirá que no todo el mundo nace con la capacidad de superar ese estado de heteronomía a la hora de entender, por ejemplo, la idea de justicia.
Uso Privado de la Razón: Utilización del conocimiento para reflexionar sobre un aspecto pero sin exponer tales pensamientos a los demás. Para Kant este uso se realiza mediante la adaptación a un cierto ámbito, desplazando el pensamiento ilustrado de la persona para ceñirse a las circunstancias concretas de este ámbito con la intención de alcanzar un bien común. Por otro lado, Platón defendía una aristocracia del saber, la cual se basaba únicamente en el uso de la razón de los filósofos (gobernantes) independientemente de las circunstancias.
Uso público de la razón: Es lo que hoy llamamos libertad de expresión. Se entiende por uso público de la razón el que alguien hace en público para dirigirse a otros como experto, dando a conocer sus ideas de forma argumentada. Según Kant, solo si el hombre dispone de libertad para desarrollar el uso autónomo de la razón se podrá conseguir la Ilustración. Thoreau defendió la desobediencia civil afirmando que era el fundamento principal de la libertad de expresión.
Voluntad del pueblo: Facultad del pueblo de decidir y ordenar la propia conducta. Kant dirá que somos parte de una sociedad y que debemos subordinar la voluntad individual a la voluntad del pueblo para progresar, la voluntad del pueblo por ello se trata del consenso resultante del acuerdo de un grupo social, dirá que para ser legítimo deberá ser un consenso racional. Rousseau dirá que sociedad y persona son uno y que la voluntad general está representada por lo que desea la mayoría (base democracia).
Religión: Conjunto de creencias y costumbres que establecen un sistema moral fundamentado en la existencia de uno o varios seres superiores. Kant determina que es necesaria la existencia de Dios para dar sentido a la ética del deber, sometida a la razón práctica. Por eso plantea una religión natural, es decir, al margen de las instituciones, ni Estado ni Iglesia deben de imponer sus valores. Para otros autores como San Agustín, los dogmas de la religión Cristiana son una parte necesaria del proceso de pensamiento para llegar a conocer verdades.