4.2.3. Res Extensa
Descartes demuestra que existen los cuerpos porque Dios como sustancia infinita lo garantiza. Por tanto, la esencia de los cuerpos es la extensión (Res extensa) enfrente del pensamiento o alma (Res Cogitans) que son inextensos.
Con esto Descartes distingue entre dos cualidades:
– Primarias – Extensión, figura y movimiento.
Cualidades objetivas sobre las que se puede tener un conocimiento claro y distinto (Medible y Cuantificable – Procedimientos Matemáticos, Descartes geometriza los cuerpos)
– Secundarias (color, olor, sonido…). Son subjetivas y causan sensaciones en nosotros.
EL ENFOCAMIENTO MECANICISTA: LA MATERIA EN MOVIMIENTO
Descartes explica que contempla el cuerpo humano como una máquina, para Él un cuerpo humano malo es como un reloj construido defectuosamente y un cuerpo sano como un reloj en la que todas las piezas funcionan correctamente.
El cuerpo humano es una sustancia, atributo de la cual es extensión, es decir, es materia en movimiento con longitud, amplitud y profundidad. Asimismo, el mundo es un gran mecanismo, explicable en términos cuantitativos. De esta manera el modelo mecánico unifica toda la realidad.
La materia son las piezas, la ruedas y los encadenamientos; El movimiento de la máquina se transmite mediante las diversas piezas. Además, hay unas leyes que se cumplen a la perfección.
Lo mismo pasa con el universo: contiene una materia gigante que transmite el movimiento a los planetas en sus órbitas de acuerdo con leyes determinadas matemáticamente. (Mecanicismo: materia en movimiento acorde con leyes matemáticas, perfectas, provenientes de Dios – infinito).
5. ¿Cómo se supera el solipsismo?
Ningún filósofo se atrevíó a defender este punto de vista tan radical, ni, por supuesto, Descartes. Hay que tener cuidado con esta cuestión ya que en el ejercicio de la duda metódica hay un momento en el que Descartes parece abrazar este punto de vista: tras dudar de la existencia de los cuerpos y de las mentes Descartes descubre que existe él mismo como ser pensante, pero no sabe aún si existe alguien más –cae por lo tanto en el solipsismo–, pero inmediatamente intenta mostrarse a sí mismo que no está solo, y lo hace precisamente demostrando que, además, existe Dios. Finalmente cree estar convencido también de que la bondad de Dios garantiza la creencia en la existencia de las cosas físicas y de las otras mentes, superando de este modo la duda metódica y eliminando definitivamente la “soledad radical” a la que le había conducido dicha duda.
Para entenderlo: SOLIPSISMO = Teoría idealista subjetiva según la cual sólo existen el hombre y su conciencia, de modo que el mundo objetivo, incluidos los seres humanos, existe únicamente en la conciencia del individuo. (Descartes ACUDE A Dios)
*Explicar La Res Infinita
6. Explica la Concepción humana de Descartes / Concepción Antropológica de Descartes/ Dualismo cartesiano/ Concepción de cuerpo y alma de Descartes.
Descartes señala que la carácterística de los cuerpos es la extensión; no obstante, la sustancia alma es inextensa. Así, entonces, cuerpo y alma son realidades distintas con naturaleza no coincidentes: el cuerpo no puede pensar y el alma es la esencia del ser humano, que puede existir sin el cuerpo. Existo mientras no dejo de pensar. Según Descartes, pensar no depende de nada material, por tanto “el alma es enteramente distinta del cuerpo, y hasta más fácil de conocer que este, y, aunque el cuerpo no existiera, el alma no dejaría de ser todo lo que es”.
Descartes expone una concepción dualista del ser humano: el alma como una sustancia pensante y el cuerpo como una sustancia extensa. El ser humano es una uníón de las dos sustancias, que son independientes.
Decir que soy una cosa que piensa equivale a decir afirmar que “soy una mente, un alma, un intelecto o una razón”. Ahora bien, aunque la naturaleza de las dos sustancias requiera que estén separadas, el grado de integración del cuerpo con el alma es tan estrecho que ambas forman una totalidad. Ej: Una herida en el cuerpo causa dolor, y cuando tengo hambre se produce la necesidad de alimento. Se trata así de una verdadera uníón que expresa una relación de interacción entre alma y cuerpo.
PROBLEMAS DEL DUALISMO
El dualismo alma-cuerpo dejó abierto un gran debate a la posteridad. En su correspondencia, la princesa Elizabeth de Bohemia preguntó a Descartes como era posible que el alma y el cuerpo interactuasen, si son tan diferentes. Descartes respondíó con ambigüedad, que experimentan ciertamente la interacción, y acababa por remitir a Dios.
Descartes escribíó Las pasiones del alma, para explicar cómo influyen las pasiones en el cuerpo. Ahora bien, en esta obra tampoco no súperó su dualismo: remitíó a la glándula pineal, al cerebro, que consideraba la sede del alma. Aquí se registran todas las actividades y después, a través de los nervios y la sangre, pasan al resto del cuerpo. Concluyó que el alma controla las pasiones sin dejar que la dominen.
El dualismo de Descartes condiciona también la libertad de la voluntad humana. En relación con el cuerpo, todo se rige por leyes naturales, que son mecánicas. Solamente el alma es libre, con capacidad de iniciativa, y controla las acciones del cuerpo. El cuerpo, como mecanismo, puede ser objeto de estudio y de experimentación científica.
Por su libertad, el ser humano tiene capacidad de autonomía: la subjetividad racional decide sin que ninguna fuerza ajena la prive de hacerlo. La libertad es exclusiva del ser humano. Descartes concedía una gran importancia a la libertad: “es propiamente la cosa más noble que puede haber en nosotros, tanto que nos hace semejantes a Dios y parece eximirnos de estar sujetos, y, por tanto, el buen uso de esa libertad es el más grande de todos nuestros bienes”. Por otro lado, la posición dualista convierte a los animales en puras máquinas o simples autómatas por el hecho de no tener alma. Son únicamente extensión y materia con acciones y movimientos. A estos seres vivientes no les pertenece ni la libertad ni el alma. Y sin alma no encontraremos tampoco ni sentimientos ni emociones.