Vida de Marx
La Revolución Industrial comenzaba a transformar la sociedad del Antiguo Régimen en una sociedad de clases (la burguesía y el proletariado). El liberalismo defendía el poder del Estado no autoritario, limitado y con división de poderes. En lo social, el liberalismo propugna la autonomía y la libertad del individuo. En lo económico, el liberalismo tiene como sus principales teóricos a Adam Smith y David Ricardo. Ambos defienden que la economía ha de regirse por la ley del libre mercado. El socialismo englobó a un conjunto de teorías que buscaban la liberación del proletariado, pero que se diferenciaban por las estrategias a seguir para conseguir dicho fin. El anarquismo buscaba la liberación del proletariado, pretendía acabar con el Estado.
Karl Marx nació en 1818. Su familia pertenecía a la clase burguesa alemana. Estudió filosofía y derecho. Comenzó a trabajar como redactor de la Gaceta Renana y desde allí denunció la dura situación de explotación de los trabajadores alemanes. Pero el régimen político prusiano no estaba dispuesto a permitir las revueltas obreras, Marx decidió trasladarse a París en 1843. También fue expulsado de Francia por sus actividades políticas, volviendo a Alemania otra vez y luchando contra el poder monárquico prusiano. Esto le llevó a que fuese expulsado de nuevo de su país y se fue a Londres, donde murió en 1883. Durante el exilio londinense, se dedicó a estudiar las teorías económicas de Adam Smith y David Ricardo. Fruto de esta investigación es su principal obra: El Capital. Las obras de Marx reflejan el ambiente intelectual europeo, dominado por el desarrollo de las ciencias experimentales y el espíritu positivista.
El ideal del Superhombre en Nietzsche
El superhombre es un nuevo hombre, un tipo moral que asume los valores de la vida; que sabe decir “sí” a todo. El superhombre es un prototipo moral de nuevo hombre: el que es capaz de ser fiel a la tierra y de crear unos valores positivos con la vida.
En Así habló Zaratustra, Nietzsche nos explica cómo será el tránsito del hombre al superhombre por medio de las tres metamorfosis. Nietzsche utiliza a ciertos animales para representar moralmente la conducta de los seres humanos. Así, el texto narra cómo es la transformación del camello en león y la de este en niño. El camello simboliza a los que se contentan con obedecer ciegamente, a los débiles, a aquellos que están sometidos al mandato del “tú debes” que les ordena el dragón. El camello debe transformarse en león. El león representa al hombre que niega todos los valores tradicionales; a quien se revela contra la moral que le quieren imponer y se crea su propia libertad. Frente al “tú debes” del camello, el león dice “yo quiero”. Pero se trata de una libertad negativa, de una libertad que se construye diciendo “no”, que para afirmarse, necesita negar. Por eso, el león ha de transformarse en niño. El niño se siente con capacidad para crear nuevos valores, los valores de la vida y de la tierra. Y frente al “tú debes” del camello, o al “yo quiero” del león, el niño dice “yo soy”.
Con la muerte de Dios, la vida puede vivirse como un juego. El superhombre comprende que ha sido el mismo hombre quien ha inventado los valores del mundo suprasensible y que, por tanto, estos no son reales y lo único que vale la pena es la vida misma en este mundo. El superhombre no tiene prejuicios, es inocente. El superhombre es quien decide qué es lo bueno y qué es lo malo, porque está más allá del bien y del mal, porque sabe que lo bueno es todo aquello que afirma la vida, lo que la hace crecer, mientras que es malo todo lo que la niega. El superhombre no tiene necesidad de inventarse otros mundos, sino que le bastan este mundo y esta vida, y los afirma de todas las maneras posibles.
Vida de Nietzsche
En filosofía había varias tendencias: por un lado, el materialismo histórico de Marx se empeñó en transformar la realidad social cambiando las estructuras económicas, mientras que, por otro lado, el vitalismo, en el que se encuentra Nietzsche, insiste en el carácter creador de la vida y pretende la transformación de la acción humana mediante la actividad creadora del arte.
Nació Nietzsche en 1844. Su infancia estuvo marcada por un ambiente familiar religioso. A partir de los 12 años, comenzará a sufrir fuertes dolores de cabeza. A los 15 años comenzó a leer a Schopenhauer. Con 20 años comienza sus estudios de teología y filología clásica en la Universidad de Bonn. A los 24 años es nombrado catedrático extraordinario de la Universidad de Basilea adquiriendo la nacionalidad suiza.
En 1879 abandonó la universidad y se dedicó a viajar por varias ciudades europeas buscando el buen clima que le aliviara de sus continuas jaquecas. El 25 de agosto de 1900 muere.
Etapas en la obra de Nietzsche
Respecto de sus obras se pueden distinguir cuatro periodos:
- Periodo romántico: La obra fundamental es El nacimiento de la tragedia en el espíritu de la música. Su pensamiento se inspira en Schopenhauer y la música de Wagner.
- Periodo positivista o ilustrado: Su filosofía se inspira en los filósofos ilustrados (Voltaire), y adopta una postura positivista.
- Periodo: el mensaje de Zaratustra: Su obra Así habló Zaratustra, rechaza toda metafísica e insiste en la necesidad de cambiar los valores morales de la cultura occidental.
- Periodo crítico: Nietzsche ataca directamente a toda la cultura occidental. Las obras son: El crepúsculo de los ídolos, o cómo filosofar a martillazos.
La Existencia de Dios: Perspectivas Filosóficas
Tomás de Aquino
Tomás de Aquino elaboró cinco argumentos para demostrar la existencia de Dios:
- Vía del movimiento: Es un hecho de experiencia que hay movimiento en el mundo. Pero lo que se mueve ha tenido que ser movido por otro. Es imposible una serie infinita de causas que expliquen el movimiento. Por tanto, existe un primer motor inmóvil que ha originado el movimiento: Dios.
- Vía de la causa eficiente: Se parte del hecho de que nada en el mundo sensible es causa de sí mismo. Luego todo lo que existe, lo hace por una causa, pero esa causa existe a su vez por otra causa, etc. Como no podemos prolongar la cadena de causas eficientes al infinito, tiene que haber una primera causa eficiente: Dios.
- Vía de la contingencia: Partiendo de que los seres del mundo existen de hecho, pero podrían no existir, se concluye que han tenido que ser creados por alguien: Dios.
- Vía de los grados de perfección: Partiendo del hecho de que hay cosas que son más perfectas que otras, se concluye que Dios es el ser sumamente perfecto y la causa de las perfecciones en los seres.
- Vía de la inteligencia ordenadora: Se parte del hecho de que hay un orden en el universo que se manifiesta en el comportamiento natural de los seres del mundo: todos ellos tienden hacia un fin. Pero la mayoría de dichos seres no conocen el fin hacia el cual tienden, por lo que este tiene que haberles sido dado por un ser inteligente. Como no se puede continuar la cadena al infinito, tendrá que haber una primera inteligencia ordenadora. Y tal inteligencia es Dios.
Marx y la religión
Marx considera que no es Dios quien crea al hombre, sino que ha sido el hombre quien ha creado a Dios: el hombre toma lo que considera mejor de sí mismo y lo proyecta fuera de sí, en el ámbito de lo infinito. Esta proyección es el resultado de la alienación en la que vive el hombre, desvalorizado y utilizado como mercancía en los sistemas de producción injustos que se han ido desarrollando a lo largo de la humanidad.
En segundo lugar, la religión también es alienación porque desvía al hombre del único ámbito en donde le es realmente posible la salvación y felicidad. Así pues, la religión consuela al hombre por el sufrimiento que padece en este mundo. Este consuelo, que solo es ficticio, le quita al hombre la capacidad, la energía y la determinación para cambiar las situaciones económicas, sociales y políticas que son las realmente culpables de su sufrimiento.
En tercer lugar, su crítica a la religión se extiende también al hecho de que la religión suele tomar partido por la clase dominante.
Marx creyó que cuando desaparezcan las condiciones económicas injustas originadas por la existencia de la propiedad privada, también desaparecerá la alienación y, por consiguiente, también la religión.