Capitalismo Industrial y la Crítica de Marx
El auge del capitalismo industrial en Inglaterra trajo consigo profundos cambios sociales. Los antiguos latifundistas se transformaron en la nueva burguesía industrial, mientras que una gran masa de trabajadores, el proletariado, se vio sometida a condiciones de explotación. Karl Marx realizó un análisis crítico de la situación social generada por la industrialización, abogando por una revolución del proletariado. Este periodo también presenció la caída del Antiguo Régimen y el surgimiento de democracias con criterios liberales, en gran parte impulsadas por la Revolución Industrial. Las fábricas, como nuevos centros de trabajo, se caracterizaron por una marcada división del trabajo, dando lugar a una sociedad injusta y desigual.
Influencias Filosóficas en el Pensamiento de Marx
Desde el punto de vista filosófico, Marx se nutrió de la izquierda hegeliana, la cual criticaba la situación sociopolítica utilizando el método dialéctico de análisis. También se vio influenciado por la economía clásica, que establecía la relación entre trabajo y valor, y por el socialismo utópico, que criticaba el liberalismo económico y abogaba por la lucha contra la injusticia social. La filosofía alemana, en particular la concepción dialéctica de la historia de Hegel y la definición del hombre como ser histórico, también fueron fundamentales en la formación de su pensamiento.
Materialismo y Conciencia
Marx adoptó una perspectiva materialista. Para él, la materia es dinámica, infinita en duración (eterna, increada), extensión (espacio), profundidad y movimiento. El movimiento y la materia son inseparables. En cuanto a la conciencia, Marx distingue entre la conciencia de sí, la conciencia psicológica, la conciencia de clase (conocimiento de los intereses de nuestro grupo social) y la conciencia social, que se forma en las sociedades a través de la asunción de creencias y costumbres.
El Hombre según Marx: Trabajo y Alienación
Marx criticó la actividad espiritual que priorizaba el alma sobre el cuerpo y definía al hombre como un animal racional. Desde su carácter materialista, el hombre es:
- Ser supremo: Dios es un consuelo, una proyección de atributos humanos.
- Ser natural activo: La naturaleza, el trabajo y las necesidades están intrínsecamente ligados.
- Ser social: La sociedad, el trabajo y las relaciones sociales son interdependientes. El hombre está condicionado por la organización social del trabajo y su pertenencia a una clase social.
- Ser histórico: El hombre se define en función de sus relaciones con la naturaleza y con los demás hombres.
El trabajo es central en la teoría de la alienación de Marx. A medida que avanza el capitalismo, los trabajadores se empobrecen y se convierten en una mercancía más. El trabajo deshumaniza en lugar de permitir la realización personal. El trabajador se convierte en una cosa, se esclaviza y se aliena.
Formas de Alienación
La alienación económica es la más importante para Marx, ya que da lugar a las demás. Se manifiesta en varias formas:
- Respecto al producto de su trabajo: El trabajador no controla sus productos, que se convierten en mercancías.
- Respecto a la propia actividad de trabajar: No hay satisfacción ni desarrollo personal. El trabajo es impuesto por la fuerza de las circunstancias externas, un medio para un fin.
- Respecto a la naturaleza: La actividad productiva creativa se reduce a la mera supervivencia.
- Respecto a otros hombres: Se genera enemistad debido a las relaciones mercantiles y competitivas.
El trabajo alienado es consecuencia de la propiedad privada. El comunismo, según Marx, eliminará la alienación económica y, por ende, las demás formas de alienación: social (clasificación de los seres humanos según sus bienes), política (el Estado representa solo los intereses de la clase dominante) y religiosa (los hombres son dominados por la invención de las clases superiores, que es Dios, y encuentran consuelo en ella).
Materialismo Histórico y Dialéctica
Materialismo Histórico
Las transformaciones sociales se explican a través del materialismo histórico, una teoría científica que sostiene que la estructura económica determina la estructura ideológica. La historia se rige por la producción material y el modo de producción (esclavismo, feudalismo, capitalismo). Este último está formado por:
- Estructura Económica:
- Fuerzas productivas: Capacidad de producción de una época, incluyendo los medios de producción.
- Relaciones de producción: Relaciones entre los propietarios de los medios de producción y los productores, basadas en la propiedad de los medios y la división del trabajo.
- Superestructura Ideológica: Incluye la estructura jurídico-política de la sociedad y la ideología (conjunto de ideas, valores y creencias). La ideología imperante es la de la clase dominante, que justifica la estructura económica del momento y falsea la realidad para legitimar las injusticias.
Dialéctica Histórica
El motor de la historia, el cambio social, es el enfrentamiento entre explotadores y explotados, inevitable e independiente de las conciencias y voluntades individuales. Los seres humanos se agrupan en clases sociales según su situación en la estructura económica (propietarios y trabajadores). Las relaciones de producción son cuestionadas por un grupo insatisfecho, lo que lleva a una revolución y al establecimiento de una nueva estructura económica y una nueva superestructura ideológica. Este cambio histórico busca eliminar la propiedad privada y las clases sociales. Las etapas de este proceso son: dictadura del proletariado, socialismo y comunismo.
Materialismo Dialéctico
El materialismo dialéctico es una consecuencia del materialismo histórico. Concibe la realidad como un proceso material en sucesión de fenómenos, a partir de otros preexistentes. Las leyes que determinan su evolución, desde lo simple a lo complejo, afectan a toda la realidad, tanto natural como humana (histórica). Estas leyes son:
- Unidad y lucha de contrarios: Todos los fenómenos son el resultado de la lucha de contrarios relacionados, causa del movimiento en la naturaleza, la sociedad y el pensamiento.
- Transición de la cantidad a la cualidad: La variación en la cantidad de materia transforma una cosa en otra distinta. Esto se aplica al desarrollo de los seres y los fenómenos naturales y sociales.
- Negación de la negación: Resolución de la contradicción, dando lugar a una realidad nueva que contiene los aspectos positivos de lo negado.
La Ilustración y el Despotismo Ilustrado
El Despotismo Ilustrado fue una forma de gobierno que buscaba conciliar el absolutismo con las ideas de la Ilustración. Esta última representó un esfuerzo del ser humano por salir de su «minoría de edad», rechazando que otros piensen por él. La Ilustración pretendió racionalizar a los seres humanos, basándose en los siguientes principios:
- Confianza en la razón: La razón puede conocer la realidad y solucionar problemas, sin someterse a ninguna autoridad.
- Crítica de la religión y de la moral: Se criticaron las formas históricas de religiosidad, rechazando el fanatismo y abogando por una religión en los límites de la razón. El pensamiento debía estar al margen de Dios. Actuar moralmente significa actuar de acuerdo a la razón y al deber.
- Valoración de la ciencia y la técnica: La ciencia puede descubrir las leyes que rigen la naturaleza, predecir el curso de los acontecimientos y controlarlos. Se hace posible la explicación del mundo sin recurrir a Dios (ej. la Física de Newton).
- Creencia en el progreso de la humanidad: Se creía que todos los seres humanos serían ilustrados, educados y salvados de la miseria, la opresión, la ignorancia y la superstición.
- Concepción de la política: Se promovía la igualdad, la tolerancia religiosa y la libertad de pensamiento.
Kant: Conocimiento y Ética
Kant analizó la razón como guía de la actividad humana, tanto en su uso teórico (científico) como práctico (moral). Se preguntó: ¿Qué puedo conocer? ¿Qué debo hacer? ¿Qué me cabe esperar? En resumen: ¿Qué es el hombre?
El Conocimiento: Uso Teórico de la Razón
Kant estudió las condiciones de las matemáticas y la física. Los juicios sintéticos a priori amplían el conocimiento y son universales, necesariamente ciertos y previos a la experiencia. Las matemáticas se basan en el espacio y el tiempo, mientras que la física se basa en categorías. No todo el conocimiento procede de la experiencia, aunque nuestro conocimiento comience por ella. Hay formas impuestas por el sujeto.
Kant propuso el idealismo trascendental, que sintetiza racionalismo y empirismo. El conocimiento se compone de lo que recibimos a través de la experiencia y lo que nuestras facultades de conocimiento imponen a esa experiencia de forma innata: espacio-tiempo y categorías.
Facultades del Conocimiento
- La sensibilidad: Capta los fenómenos a través de los sentidos, produciendo sensaciones o intuiciones. Estas pueden ser empíricas (de la experiencia, a posteriori) o puras (a priori y trascendentales, puestas por la sensibilidad del sujeto, organizan y dan sentido al caos de los datos sensibles procedentes de la experiencia para constituir el fenómeno, como el espacio y el tiempo). Kant realiza un giro copernicano: lo decisivo en el conocimiento es la mente del sujeto, que organiza los datos de los sentidos.
- El entendimiento: Explica las representaciones que capta la sensibilidad a través de los conceptos. Estos pueden ser empíricos (proceso de abstracción, a posteriori) o puros (a priori y trascendentales, categorías, condiciones que pone la mente del sujeto y que posibilitan el conocimiento de la realidad, como sustancia, causa, existencia, etc.).
Proceso de Conocimiento
- La sensibilidad, con las intuiciones puras, organiza el caos de las sensaciones, creando la representación mental del fenómeno (lo que aparece).
- El entendimiento, con sus conceptos puros, organiza el caos fenoménico permitiendo conocer las leyes de la naturaleza.
Sensibilidad y entendimiento son complementarios. La dialéctica trascendental plantea si la metafísica es una ciencia. Establece leyes acerca de Dios, el alma y el Universo. Sin embargo, Kant considera que esto es un uso ilegítimo de las categorías, al aplicarlas a algo que queda más allá de la experiencia. Por lo tanto, la metafísica no es una ciencia. Hacer metafísica es inevitable en la razón humana. Dios, el alma y el mundo son tres ideas de la razón, contradictorias. Los noúmenos se piensan, no se conocen, no hay experiencia de ellos, no se les puede aplicar las categorías. Son cosas en sí mismas, el límite del conocimiento.
La Ética: Uso Práctico de la Razón
Kant distingue entre éticas materiales (anteriores, no universales, no necesarias, a posteriori, teleológicas, siguen el imperativo hipotético) y la ética formal (validez universal y necesaria, a priori, establece la forma general para actuar). Una conducta es buena si respeta el deber (buena voluntad), y mala si se guía por el interés. Obrar por deber implica que la ley moral debe respetarse incluso en contra de los propios intereses.
El imperativo categórico es la ley moral, universalmente válida, presente en la razón del sujeto, que le indica incondicionalmente, de un modo absoluto (categórico) qué forma ha de adoptar su conducta para actuar moralmente. Se basa en la libertad del sujeto, que solo obedece a su razón (autonomía). Actuar por deber conduce a la virtud y al respeto a los seres humanos, considerados seres racionales, morales y libres.
Dios, el Alma y la Libertad en el Universo son postulados de la razón práctica: proposiciones exigidas por la razón práctica desde el momento en que existe en ella la ley moral, pero que no amplían el conocimiento. Son la libertad del sujeto (exigida por la ley moral), la inmortalidad del alma (progreso hacia la virtud) y la existencia de Dios (recompensa con la felicidad).
Dios, Sociedad y Razón Práctica según Kant
Dios
El alma y Dios no son asequibles al conocimiento científico, ya que no son fenómenos que se den en la experiencia. La existencia de Dios es un postulado de la razón práctica, es decir, se trata de algo no demostrable pero que debe suponerse como condición de la moral. Kant afirma la disconformidad entre el ser y el deber ser.
Sociedad
El ser humano es un fenómeno, un objeto más entre los del mundo físico. Tiene una dualidad: una dimensión empírico-sensible y otra ético-social. Debe salir de su «minoría de edad» y pensar por sí mismo para liberar su conciencia, que no estará sometida. El ser humano debe hacer el ejercicio crítico de la razón, y debe ser impulsado por el Estado.