Metafísica de Aristóteles: Teología, Ontología y Ética

La Metafísica o Filosofía Primera

Introducción: Definición General de Metafísica

Aristóteles utilizaba la expresión «Filosofía primera» o sabiduría para designar a la ciencia que trataba de una serie de temas de interés principal. Esta filosofía primera sería básicamente dos cosas:

  • Una ciencia de la primera causa del movimiento. Aristóteles considerará necesario que exista una primera causa de todo movimiento, y a esta le llama Dios. Por eso, esta parte de la Filosofía primera o Metafísica es conocida como Teología.
  • Una ciencia del ser en tanto ser. Aristóteles considera que debe haber una ciencia, más excelente que todas, que se ocupe del ser en sí mismo. A la parte de la Filosofía primera o Metafísica que se ocupa del ser se le suele denominar Ontología.

La Teología

Dios como Primer Motor Inmóvil y Causa Final

Aristóteles define el movimiento como paso de la potencia al acto. Pero como la potencia es algo pasivo, para que algo pase de potencia a acto tiene que ser movido por algo ya en acto y, a su vez, lo que está en acto habrá pasado de potencia a acto causado por otra cosa en acto, y esta cadena se prolongaría al infinito, por lo que no pasaría nunca y nada se movería. Pero las cosas se mueven, por lo que no es así. Luego, tiene que haber un Primer Motor. A esto es a lo que llama Aristóteles Primer Motor Inmóvil o Dios.

Dios puede hacer cambio sin cambiar Él, ya que Dios es causa final del movimiento del mundo.

Dios como Acto Puro y Forma Pura

De que Dios sea Inmóvil se desprenden, también, otras dos consecuencias:

  1. La materia es, en sí misma, pura potencia, que necesita de una forma para ser. Por eso, allí donde hay materia hay una predisposición al cambio, a adoptar nuevas formas. Pero dado que Dios es, por su propia naturaleza, inmóvil, ha de carecer de materia, será solo forma, forma pura.
  2. Las sustancias físicas, aun cuando llegan a ser algo en acto, siguen siendo, como hemos visto, algo en potencia. Por eso está en su naturaleza cambiar. Pero ya que Dios es inmóvil, no podrá ser nada en potencia. Por eso es solo acto, acto puro. Y por ser acto puro es absolutamente perfecto, pues no puede faltarle nada en el orden del ser. Él, más que nada, es plenamente ser.

Sin embargo, Dios tiene una actividad que no supone potencialidad, y Aristóteles nos dice que esta actividad consiste en el pensamiento. Dios piensa en el pensamiento del pensamiento, ya que no puede pensar las formas sustanciales por dos razones: 1) Porque eso significaría un conocimiento del mundo, pero Dios es ajeno totalmente al mundo. 2) Si Dios pensase en formas sustanciales, pensaría ahora en la forma sustancial hombre…

La Ontología

El Problema del Ser

Los problemas que plantea la división de un mundo real, que es un mundo de las ideas, de las cosas eternas, y otro aparente, que es el de las cosas sensibles que plantea Platón, llevan a Aristóteles a sostener que las esencias no son un tipo de cosas, separadas de las cosas sensibles, sino que están en las propias cosas sensibles: son las formas sustanciales. Pero estas son múltiples y, una vez más, se plantea el problema de encontrar un fundamento a la totalidad. Pues bien, su reflexión sobre el ser le llevará a dos planteamientos originales:

  1. Por un lado, intentará, frente a los seguidores de Parménides, explicar cómo se pueden conciliar el ser y el devenir. Esta conciliación del ser y el cambio permitirá que haya ciencia sobre las cosas que cambian. Esta ciencia será la Física.
  2. Por otro lado, intentará determinar de nuevo qué es el ser, qué se entiende por ser, y a esto se dedica la Ontología.

La primera cuestión ha quedado desarrollada en la Filosofía natural. Veamos paso a paso su respuesta a la segunda.

Ser no es el Género Supremo

Ser es aquello en que coinciden todas las cosas, todas las cosas son, de donde se podría concluir que ser es el género supremo. Se podría pensar que el ser es aquello en que coinciden todas las cosas, su género más general. Pero no es así, ya que no es lo mismo el ser referido a un metal, que el ser referido a lo bueno, aunque todos ellos sean.

El ser no es género supremo porque abarca aquel tipo de cosas que son lo mismo. Pero ser no significa lo mismo en todos los casos. Las formas de ser que significan lo mismo entre sí, son los géneros supremos y los distintos sentidos de ser. Aristóteles llama a estos géneros supremos categorías.

Las Categorías o Predicamentos

Aristóteles encuentra diez categorías o sentidos distintos del ser:

  1. La sustancia: ser algo.
  2. La cualidad o carácter: ser de cierto carácter.
  3. La cantidad: ser en cierta cantidad.
  4. La relación: ser en cierta relación a algo.
  5. La acción: ser haciendo.
  6. La pasión: ser padeciendo.
  7. El tiempo: ser en determinado momento.
  8. El lugar: ser en determinado lugar.
  9. La posición: ser en determinada posición.
  10. El hábito: ser llevando o teniendo algo.

La Unidad Análoga del Ser

Aunque ser tenga una multitud de sentidos, todos hacen referencia a un modo determinado de ser, todos hacen referencia a la sustancia. Ser tiene varios sentidos, varios modos de darse, pero todos por referencia a la sustancia, a un único sentido. La sustancia es, por lo tanto, el ser por excelencia, y desde ese punto de vista ocupa en la filosofía de Aristóteles un lugar privilegiado.

Con todo lo que hemos dicho acerca del ser, podemos sacar la siguiente conclusión: la expresión «ser» no es unívoca. Tampoco es equívoca. La expresión «ser» es análoga, es decir, nombra una multiplicidad de cosas diferentes pero con referencia a algo común.

La Ética

De qué trata la Ética

-Hemos definido lo natural como aquello que tiene

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