Karl Popper y el Falsacionismo
Introducción
Un sistema de proposiciones empíricas se considera científico si puede ser contrastado por la experiencia. El criterio para determinar el carácter científico de estas proposiciones es su falsabilidad, es decir, la posibilidad de ser refutadas. Por lo tanto, el científico debe ser falsacionista, buscando los hechos que refutan sus teorías, a diferencia del científico verificacionista, que intenta corroborar sus teorías encontrando nuevos hechos que las confirmen. El verificacionista comete la falacia de afirmación del consecuente, pues los hechos particulares no pueden confirmar las leyes universales, atentando contra los principios de la lógica, por lo que su investigación se basa en una falsedad. El falsacionista, en cambio, aplica la regla lógica del modus tollens: al encontrar un hecho que no coincide con los cálculos de la teoría, cuestiona esa teoría y la modifica para que explique los nuevos hechos recién descubiertos.
Análisis
Según el neopositivismo, la estructura de las teorías científicas es lógica: las leyes son universales y a partir de ellas se pueden deducir los hechos de observación. Sin embargo, las leyes son hipotéticas y provisionales mientras no se demuestre lo contrario con nuevos hechos que las desmientan. Según Popper, lo importante es encontrar esos nuevos hechos, de modo que la ciencia debe estar abierta a explorar y reconocer el mundo de la naturaleza. El criterio de demarcación debe servirnos para distinguir qué es ciencia y qué no lo es. Para Popper, ese criterio es el falsacionismo, mientras que los verificacionistas cometen la falacia de afirmación del consecuente. Una metodología verificacionista, fundada en encontrar coincidencias entre los hechos teóricos y los hechos observados, no sería científica, según este autor. La metodología falsacionista cumple con los criterios de la lógica al buscar la refutación de la teoría aplicando el modus tollens. Popper comete una ambigüedad al identificar lo científico con lo empírico al principio del texto, pero no es posible excluir las ciencias formales como no científicas.
Así, al afirmar que una tautología no es empírica, queda excluida de la ciencia empírica, pero no de la ciencia como tal. La observación de Popper subraya la importancia de distinguir los enunciados tautológicos, que forman parte del sistema axiomático y nos muestran el código de transmisión de una información científica, y los enunciados empíricos, que nos transmiten esa información.
Síntesis
En toda ciencia encontramos tres tipos de enunciados:
- Protocolarios: Son las anotaciones que toman los científicos describiendo sus observaciones. Representan, por tanto, los hechos y son particulares.
- Leyes: Son generalizaciones a partir de los hechos y tienen forma de universal. El paso de protocolarios a leyes se llama también inducción.
- Teorías: Agrupan varias leyes de forma congruente entre sí. Con frecuencia, contienen entidades no observables, que llamamos entes teóricos, y que sirven para unir varios campos diferentes de observación.
Los pasos que sigue toda ciencia para la formulación de sus teorías son:
- Observación de una clase de fenómenos: El científico tiene que familiarizarse con un tipo de hechos para poder establecer leyes y teorías plausibles empíricamente.
- Formulación de hipótesis que puedan explicar los hechos.
- Matematización de las hipótesis, de forma que los hechos puedan ser deducidos.
- Contrastación: Los hechos observados deben coincidir con los hechos que se deducen a partir de la hipótesis (hechos teóricos). Popper insiste en la contrastación para la validación de los hechos.
- Validación: La hipótesis es aceptada provisionalmente si está fuertemente contrastada y no ha sufrido ninguna refutación por los hechos.
El punto crucial del método científico es la contrastación con los hechos de observación. Hay dos tipos de contrastación:
- Verificación: Consiste en buscar los hechos que concuerdan con la teoría.
- Falsación: Consiste en buscar los hechos que refutan la teoría.
Thomas Kuhn y los Paradigmas Científicos
Introducción
Las teorías científicas no son sistemas aislados de ideas, sino que están en contacto entre sí y con ideas pertenecientes a otros campos del conocimiento. Dependen de las prácticas sociales y culturales de la sociedad en la que se desarrollan. Al estar estrechamente relacionadas, las teorías científicas se presentan como un sistema de conceptos e ideas que se entrelazan y sostienen entre sí. Ese sistema teórico depende, a su vez, de las relaciones sociales sobre las que se ha construido, de los intereses de la sociedad y de las ideas dominantes en la cultura. Conforme se desarrollan las ciencias, esa unidad entre las ciencias y su inserción en la vida social se intensifica y consolida. Por ello, el cambio de teoría va unido a otras transformaciones culturales, más o menos profundas según la importancia y radicalidad de ese cambio. Por tanto, la ciencia debe estudiarse desde la sociología y la historia para comprender su auténtico significado y el modo de su desarrollo.
Análisis
La astronomía se constituye como ciencia en la Academia de Platón, siglo IV a.n.e., cuando se ajustan los movimientos de los astros en el cielo con un modelo matemático, bajo la hipótesis de que la Tierra se encuentra en el centro del universo y a su alrededor giran los cielos. Ese modelo matemático suponía que las órbitas de los planetas eran circulares, pero se había complicado con epiciclos para explicar los movimientos de retroceso de los planetas, convirtiéndose en un complicado sistema de cálculo que quedaba fuera de la comprensión de los no especialistas. A pesar de ser un campo de trabajo muy especializado, estaba influido por los acontecimientos históricos y el desarrollo de otras teorías científicas. Kuhn expone tres circunstancias históricas que contribuyeron a la adopción del sistema heliocéntrico:
- En primer lugar, la teoría física sobre la caída de los objetos pesados había descartado la explicación aristotélica basada en la causa final, según la cual los graves caían para estar en su lugar natural en el centro del universo, lo que explicaba la teoría geocéntrica desde el punto de vista físico.
- En segundo lugar, la influencia del platonismo relativiza las observaciones sensibles, valorizando las ideas teóricas. El Sol, como astro principal del universo, no podía dar vueltas alrededor de la Tierra, sino al revés.
- En tercer lugar, los viajes por el Atlántico favorecieron el sistema astronómico de Copérnico porque simplifica los cálculos sobre la posición de las estrellas, que servían para determinar la posición geográfica de la nave en alta mar.
El hecho de que todas las teorías y conceptos científicos estén unidos formando un cuerpo de conocimientos hace que la propuesta falsacionista de Popper no sea la única forma de hacer ciencia, como afirma este autor. La refutación de una teoría por los hechos de observación no se dirige contra una teoría aislada, sino contra todo el cuerpo científico, de modo que el modus tollens se dirige contra una conjunción de leyes y teorías. Eso significa que alguna está equivocada, sin que sepamos de momento cuál puede ser. Hay que investigar cómo se ha producido el error. Por eso, dice Kuhn que la labor del científico es como resolver un rompecabezas, encajando los hechos en un conjunto coherente.
Síntesis
Kuhn estudia en su libro La revolución copernicana el cambio de paradigma en astronomía, cuando se sustituye la teoría geocéntrica por la heliocéntrica. Un paradigma es un modelo teórico que contiene las reglas para su comprobación, que está aceptado por una comunidad de científicos en un campo del conocimiento y es utilizado por estos para desarrollar la investigación. Mientras se mantiene un paradigma, la teoría se desarrolla según una pauta constante, aumentando el conocimiento de los hechos. Kuhn llama “ciencia normal” a ese tipo de desarrollo científico. Pero, en un momento dado, aparece una anomalía, que es un hecho recalcitrante que no se puede ajustar con la teoría, y entonces aparece la necesidad de cambiar el paradigma. Kuhn llama “ciencia revolucionaria” al cambio de paradigma, como, por ejemplo, el cambio acaecido en la teoría astronómica durante el Renacimiento. Podemos interpretar la propuesta de Kuhn como una exposición del método dialéctico en el desarrollo del pensamiento: tesis, antítesis, síntesis. La tesis es la afirmación del paradigma; la antítesis es la aparición de una anomalía que niega el paradigma; la síntesis es un nuevo paradigma, que explica los hechos ya explicados en la anterior teoría y, además, la anomalía que antes no podía ser explicada.
Galileo Galilei y la Formalización de la Ciencia
Introducción
La ciencia es un sistema de proposiciones formalizado, lo que antiguamente se hacía mediante las matemáticas, que representa los fenómenos naturales del universo de forma comprensible para el ser humano. Esto es importante, puesto que, si queremos entender las proposiciones, debemos entender nuestro idioma y manejarlo con precisión, además de tener amplitud de conceptos para poder captar correctamente estas. Se necesita la matematización.
Análisis
Comentamos conceptos importantes:
a) Filosofía significa aquí ‘ciencia’ en el sentido actual. En otros contextos, ‘filosofía’ puede significar también otras reflexiones sobre la moral, el arte o la metafísica; es decir, filosofía es el saber en general, y ese es el sentido que tiene la palabra para Galileo, dentro del contexto cultural del Renacimiento.
b) El universo es un libro quiere decir que los fenómenos que podemos observar contienen una información acerca de la naturaleza en la que vivimos, que nos llega continuamente a través de la percepción sensible. Los mensajes del universo nos llegan a través de los sentidos, formando un conjunto de conocimientos transmitidos por lo que podemos observar. Esos mensajes están codificados en forma matemática: los caracteres del libro de la naturaleza son matemáticos, figuras geométricas y números. Eso significa que las relaciones entre los fenómenos son cuantitativas en su esencia, y que las cualidades de las cosas son apariencias que deben interpretarse en forma cuantitativa. Por lo tanto, para entender los fenómenos es necesario aplicar las matemáticas, de forma que las observaciones tomen forma cuantitativa, ofreciéndonos cantidades que puedan ser relacionadas en una teoría.
c) Para establecer la forma cuantitativa de los fenómenos es necesario tener instrumentos que permitan medir los fenómenos y compararlos entre sí.
Se establece la unidad, y a partir de esa unidad podemos saber las cantidades que se van mostrando en los diferentes fenómenos. Las cualidades que percibimos por los sentidos en realidad representan cantidades diferentes de una misma sustancia, luego las diferencias cualitativas pueden reducirse a diferencias cuantitativas.
Síntesis
La vida de Galileo. Galileo es un racionalista, y está convencido de que los descubrimientos científicos son verdaderos. Pero se enfrenta a la sociedad, que considera que la Biblia es la verdad y, por tanto, la ciencia está subvirtiendo el orden social. El autor tuvo que sufrir un proceso de la Inquisición, del que solo se pudo librar negando sus convicciones más íntimas: el movimiento de la Tierra alrededor del Sol. En el método hipotético-deductivo, las leyes universales son hipótesis, pero cuando alcanzan un alto grado de corroboración (contrastación positiva), parecen verdaderas. Dentro de este método, después de establecer las leyes, se formalizan, lo que se hace de forma matemática. Hoy en día, la formalización puede ser lógica, lo que permite construir las teorías de forma más sistemática. Los momentos del método hipotético-deductivo son: observación de los fenómenos, propuesta de leyes universales, contrastación (verificacionismo y falsacionismo), validación y construcción de teorías. Los enunciados protocolarios son las anotaciones que toman los científicos describiendo sus observaciones, que se desarrollan más adelante en una matematización, como Galileo muestra que es necesario. Representan, por tanto, los hechos y son particulares. A partir de esto, se forman leyes, que son generalizaciones a partir de los hechos y que tienen forma de universal, y llegamos al final dando lugar a teorías, que agrupan varias leyes de forma congruente entre sí. Con frecuencia, contienen entidades no observables, que llamamos entes teóricos, y que sirven para unir varios campos diferentes de observación que necesitamos entender para contrastar los hechos, ya sea por verificación o falsación y, por último, la validación de la idea o no.