Teoría del Conocimiento según Hume
Análisis del Sujeto
En su búsqueda del conocimiento, Hume empieza por el análisis del sujeto. Todo parte del sujeto. Hume estudia los contenidos del pensamiento humano para saber qué es el conocimiento. Los contenidos mentales son percepciones que provienen de la experiencia.
Percepciones: Pueden ser impresiones (sensaciones que ocurren en el momento, como oír hablar a dos personas al mismo tiempo o desear tener unos zapatos que acabas de ver) o ideas (imágenes de recuerdos, como cuando recuerdas el frío del invierno o piensas en lo que hiciste en una fiesta). Por ejemplo, en clase recuerdas la película que viste ayer (impresiones de la clase: lo que ocurre en ese momento en clase) e idea de la película porque la recuerdas.
Percepciones según su procedencia: Hay percepciones de sensación, que provienen de los sentidos externos (como un olor o sabor determinado), y percepciones de reflexión, que provienen de nuestra mente (como un estado de tristeza o alegría).
Ideas, se dividen en dos tipos: simples (no se pueden dividir en percepciones más pequeñas, como el olor dulce de un perfume o el tacto del papel de lija) y complejas (pueden dividirse en percepciones más simples, como la percepción de una rosa que se descompone en diferentes cualidades, como el olor, el tacto y el color).
Principio de la Copia
El principio de la copia es un criterio para determinar la validez de una idea. Consiste en saber si una idea es verdadera según de qué impresión provenga. Si no se sabe de qué impresión proviene, se trata de una idea irreal, ya que es producto de la imaginación. Por ejemplo, un unicornio es la combinación de un caballo y un cuerno, pero no se puede demostrar de qué impresión proviene. En el caso de la idea de Dios, sabemos que es un hombre bueno y poderoso, pero no podemos decir de qué impresión proviene, sino que es un conjunto de cualidades que nosotros le hemos dado.
Asociación de Ideas
Hume relaciona todos los pensamientos según las leyes de asociación de ideas. Hay tres principios de asociación de ideas:
- Semejanza: Relacionar dos ideas porque se parecen. Por ejemplo, cuando ves un paisaje pintado en un cuadro, piensas en cómo es en realidad.
- Contigüidad en el espacio y el tiempo: Relaciona ideas según la distancia en que se encuentran. Por ejemplo, cuando ves un barco, piensas en el mar.
- Relación causa-efecto: Relaciona ideas a partir de la experiencia repetida de un hecho. Por ejemplo, cuando ves una llama en un edificio, sabes que habrá mucho humo.
Tipos de Conocimiento
- Relaciones de ideas: Oraciones siempre verdaderas pero que no describen la realidad. Por lo tanto, no amplían el conocimiento, ya que es como el sujeto y el predicado, donde B está dentro de A (por ejemplo, la suma de los ángulos de un triángulo es 180º).
- Cuestiones de hecho: Nos dan información que puede ser o no verdadera, y hay que comprobarlo con la experiencia. Amplía nuestro conocimiento e informa de algo en un cierto momento (por ejemplo, María baila).
El Problema de la Causalidad
El conocimiento queda limitado a dos cosas: impresiones (que se experimentan en el mismo momento) e ideas que provienen de impresiones (aquello experimentado en el pasado). Por lo tanto, del futuro no podemos tener conocimiento, ya que no tenemos impresiones del futuro, dado que no podemos experimentarlo. Por causa entendemos que existe una relación obligatoria entre A y B, pero lo único que sabemos es que primero sucede A y luego B. Por ejemplo, cuando escuchamos un rayo, creemos que siempre escucharemos un trueno después, porque así ha pasado siempre. En resumen, nos hemos acostumbrado a creerlo, ya que es un hecho que siempre se repite igual, pero creer no es saber, sino suponer.
Crítica a la Ciencia y la Metafísica
Hume critica el principio de causalidad y, por lo tanto, también hace una crítica a las ciencias que se basan en tal principio. La relación de causalidad es una costumbre de nuestro entendimiento que tiende a relacionar ideas de una determinada manera. Así, cualquier disciplina que se base en esta costumbre simplemente será una creencia. Lo mismo ocurre con la metafísica, que no puede ser considerada conocimiento porque trata de cosas que no se pueden comprobar con la experiencia, así que no es propiamente un conocimiento.
Crítica a la Idea de Sustancia
Hume critica la sustancia basándose en el criterio de validez de su teoría del conocimiento. Según este criterio, una idea es verdadera si proviene de una impresión; si no proviene de ninguna impresión, es una idea falsa. Pero Hume solo clasifica las impresiones en dos tipos: de sensación y de reflexión. Entonces, ¿de dónde proviene la idea de sustancia? Según Hume, no hay ninguna idea de sustancia que provenga de una impresión. Los que creen en la idea de sustancia defienden que esta no es ningún sabor, ni olor, ni color, es decir, que no es algo que podamos ver, oír o tocar. Lo que sí podemos oír, ver y tocar son los accidentes de la sustancia, pero no la sustancia en sí. Tampoco han definido nunca la sustancia como una sensación o emoción. Así que, en conclusión, a la idea de sustancia no le corresponde ninguna impresión, ni de sensación ni de reflexión. Por lo tanto, según Hume, una idea a la que no le corresponde ninguna impresión es una idea falsa.
Teoría Ética: El Emotivismo Moral
La moral tiene que ver con las emociones y los sentimientos, pero no con el conocimiento. Su ética se basa en el emotivismo, una teoría según la cual las ideas éticas y morales que provienen de la emoción o el sentimiento no tienen una justificación racional. Es contrario al intelectualismo moral de Platón y Descartes, que aseguran que si conoces el bien, actuarás correctamente, ya que los que actúan mal son ignorantes. Por lo tanto, nuestras acciones están motivadas por sentimientos de atracción o aversión que nos producen ciertos comportamientos. Como por ejemplo la simpatía, propia de la naturaleza humana, la inclinación o tendencia de los seres humanos a participar y a revivir las emociones de otros, y la educación, que racionaliza y encarrila los sentimientos de aprobación y de rechazo ante determinadas acciones. La ética de Hume es una ética utilitarista que concibe como bien aquello que proporciona placer y es útil a la mayoría. Hume dice que los seres humanos tenemos sentimientos y emociones, que funcionan por simpatía hacia otros y que desde pequeños, con la educación, lo hemos aprendido.
La Falacia Naturalista
No es lo mismo decir que las mujeres siempre se han encargado de los hijos (describe un hecho), que decir que las mujeres tienen que encargarse de los hijos (valora un hecho).
Hume denuncia que a menudo se utilizan frases de tipo descriptivo (“es así”) como justificación automática de frases valorativas (“tiene que ser así”).
Del “es” no se puede concluir el “tiene que ser”.