Platón y Aristóteles: Ontología, Epistemología, Ética y Política

Teoría de las Ideas (Ontología)

Para Platón, las ideas representan la verdadera realidad, y el conocimiento de estas ideas nos proporciona ciencia (episteme). Estas ideas son objetos de la razón, son las causas de los objetos naturales. Por un lado, el mundo sensible (físico) en el que habitan todas las cosas materiales y, por lo tanto, imperfectas, cambiantes y se perciben a través de los sentidos. Por otro lado, el mundo de las ideas, que son realidades trascendentes, perfectas, eternas e inmutables; y son imitadas en el mundo sensible. No se perciben. Todos los apartados de la filosofía de Platón parten de esta teoría.

Teoría del Conocimiento (Epistemología)

El verdadero conocimiento consiste en ascender mediante la práctica del método dialéctico hasta alcanzar las realidades más complejas y perfectas (ideas). Para poder llegar al conocimiento no podemos guiarnos por los sentidos, ya que la percepción se dirige exclusivamente a las apariencias (Heráclito), así que alcanzamos el verdadero conocimiento a través de la razón (Parménides). En ese camino atravesamos tres estados: el nivel de la ignorancia, el nivel de los sentidos y el nivel de la razón. Según la teoría de la reminiscencia, Platón expresa que conocer no es aprender algo nuevo, sino recordar aquello que el alma ya sabía, el alma debe ser eterna, inmortal.

Cuerpo y Alma (Antropología)

El ser humano se compone de dos sustancias: el cuerpo, material y mortal y el alma; inmortal e inmaterial. Platón distinguió el alma en tres partes:

  • La parte racional o inteligible: en el cerebro. Desempeña las funciones propias de la mente; pensamiento y voluntad, y su virtud es la fortaleza.
  • La parte irascible (sentimientos): en el corazón. Desempeña la función de dirigir los sentimientos. Su virtud es la fortaleza.
  • La parte concupiscible (deseos): Consta de sentimientos y deseos. Su virtud es la templanza.

Ética

El Bien es el principio ético máximo, solo actúa sobre quienes tienen la voluntad de buscarlo. Platón se guiaba por el intelectualismo moral, en el que el sabio es virtuoso. Y al ser virtuoso se aprende. Las virtudes son hábitos permanentes que impulsan a obrar con la mayor perfección posible y se divide en las tres partes del alma:

  • La sabiduría o prudencia: para poder alcanzar la verdad y el Bien.
  • La fortaleza: esfuerzo y voluntad.
  • Templanza: se basa en el dominio de uno mismo.
  • La justicia: orden, armonía de las partes del alma o de la sociedad.

Educación

La educación es necesaria para ser plenamente humano. Para alcanzar la sabiduría, es preciso ascender de un grado de conocimiento a otro y lo que eso impulsa es la educación. El proceso de aprendizaje es la dialéctica; por medio de las preguntas y respuestas se alcanzan los principios de la ciencia. Quienes deben de dar ese último paso son los filósofos; aquellos que habiendo alcanzado la ciencia consiguen conocer el último grado de conocimiento: el Bien. El programa educativo platónico desarrolla las virtudes humanas y se desarrolla en cuatro etapas: educación física, científica, filosófica y moral.

Política

La filosofía de Platón se mueve por una intención política, la de lograr que los mejores gobiernen. Principios:

  • En la especialización de los ciudadanos: cuando cada ciudadano cumple con su obligación, la justicia se realiza plenamente en la ciudad.
  • La correlación estructural entre el alma y la sociedad en la que las tres clases sociales; gobernantes, guardianes y productores.
  • La justicia es la meta de la política en la que cada clase social desarrolla la virtud que le corresponde.
  • Las leyes se basan en los principios universales y no en intereses.
  • La educación es la base del estado y debe orientarse en la formación de gobernantes y guardianes.

Para Platón la forma ideal de gobierno sería la monarquía aristocrática o gobierno de los más sabios.

Comparativa con Aristóteles: Hilemorfismo

Platón y Aristóteles rechazaron el escepticismo y coincidieron en que la realidad es cognoscible; aunque no coincidieron en su explicación de la Realidad (Ontología). Según Platón, la realidad no se reduce al mundo sensible, mientras que Aristóteles distinguió entre substancia y accidente; por un lado, el mundo circundante y perceptible, y por otro, las esencias universales. Solo la sustancia primera seria real. Aristóteles defendió el realismo frente al idealismo de Platón. Según Platón, el mundo de los sentidos no es real. Para explicar el cambio Aristóteles desarrolló la teoría hilemórfica, coincidiendo con Parménides en que el cambio consiste en que algo pase del no-ser al ser y del ser al no-ser. Este proceso consta de tres partes: el ser actual (forma) y el ser que puede llegar a ser. Los seres son sustancias constituidas por dos elementos: materia y forma. Esa concepción de la realidad tuvo una enorme importancia para la teoría del conocimiento (epistemología). Para Platón la experiencia sensible obstaculiza cualquier intento de conocimiento y para Aristóteles, este debe partir de la experiencia. Según Platón el cuerpo es la cárcel del alma, y el alma es el constituyente puro del ser humano. Según Aristóteles, el alma es principio de vida y está unida al cuerpo, conforman una unidad substancial. Aristóteles rechazó la inmortalidad del alma y la teoría platónica de la reminiscencia. Ambos difirieron en sus teorías de la felicidad. Platón vinculó la felicidad al conocimiento y Aristóteles pensaba que todos los humanos anhelan la felicidad, que consiste en vivir y actuar bien. El punto esencial del desacuerdo es el concepto de virtud. Platón asignó a cada parte del alma una virtud y la felicidad seria el equilibrio entre dichas parte y a Aristóteles creía que la felicidad se consigue a través de la práctica.

Aristóteles: Política y Sociedad

Según Aristóteles, el ser humano es un animal político que no puede vivir fuera de la sociedad. La primera asociación natural seria la familia, después el barrio, y finalmente la ciudad. La familia resulta esencial. Las formas de organización justas; aquel que persigue el bien común, la monarquía, aristocracia y la república, y injustas; aquel que persigue los intereses personales, en el que el estado justo acaba pervirtiéndose en oligarquía y demagogia. La monarquía y la aristocracia constituyen las mejores formas de gobierno. Según Aristóteles, la democracia no es el gobierno de todos. Aquellos que se dedican a la política no deben ser ni demasiado ricos ni demasiado pobres. Deben tener una serie de posesiones y tiempo libre para dedicarse a la política. Aristóteles pensaba que la eliminación de la propiedad privada era impracticable. El único principio por el que un ciudadano puede participar en la polis es el mérito. Según Aristóteles, el conocimiento no es suficiente, es necesario la virtud de la prudencia. En Aristóteles la justicia está vinculada a la ley y al merito. La ley implica que cada ciudadano deba vivir según lo que ella dicte; y el merito, en dar a cada uno lo que en propiedad merece.

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