Reacciones: Racionalismo y Empirismo
La nueva ciencia impulsó a los filósofos a crear una filosofía que la fundamentara. El racionalismo, iniciado por Descartes, y el empirismo, por Hobbes, buscaban este objetivo. Ambos valoraban el método matemático, la observación, la razón y la experiencia. Sin embargo, para los racionalistas, la razón era la autoridad final, mientras que para los empiristas, lo era la experiencia.
El racionalismo afirma que la fuente del conocimiento es la razón, que los conocimientos válidos provienen de ella, no de los sentidos. Su modelo es el sistema deductivo matemático, donde el conocimiento se infiere de principios o ideas primeras.
Características del Racionalismo
- Autosuficiencia de la razón: La razón es la fuente fundamental del conocimiento; la experiencia sensorial es secundaria.
- Sistema deductivo matemático: Se buscan proposiciones indudables, como en matemáticas, aplicando su método a la filosofía.
- Ideas innatas: Existen ideas innatas que contienen la verdad y fundamentan el conocimiento.
- Sustancia como base metafísica: La sustancia existe sin necesidad de otra cosa. Descartes postula tres: pensante, material y divina.
- Mecanicismo: El mundo se concibe como una máquina.
El Método
Descartes se preocupó por fundamentar el conocimiento. Se preguntaba cómo avanzar con seguridad, reconociendo errores pasados. Si la razón humana es valiosa y eficaz, ¿por qué la filosofía, a diferencia de la ciencia, no progresaba? Descartes creía que la ciencia poseía un método que la filosofía no. Propuso el método geométrico, introduciendo un método matemático en la filosofía.
Convencido de que, como los geómetras, el hombre puede conocer con seguridad si usa el método adecuado, en el “Discurso del método” (1637), Descartes establece cuatro reglas:
- Evidencia: Aceptar como verdadero solo lo evidente, lo claro y distinto.
- Análisis: Dividir las dificultades en partes para resolverlas mejor.
- Síntesis: Ordenar los pensamientos, desde lo simple a lo complejo.
- Enumeración: Hacer recuentos y revisiones para no omitir nada.
La Duda y la Primera Verdad
Descartes cuestionó todo el conocimiento buscando verdades indudables. Su duda universal y metódica se basa en:
Duda
- Incertidumbre sensorial: Los sentidos nos engañan (ej. la Tierra como centro del universo).
- Errores de razonamiento: El saber escolástico, basado en la razón, se volvió confuso.
- Sueño vs. vigilia: ¿Son los pensamientos ilusiones como en un sueño?
- Genio maligno: Un genio maligno podría hacernos creer como evidentes cosas falsas.
Primera Verdad
De la duda surge la primera verdad: al dudar, pienso; al pensar, existo. Pienso, luego existo. Esta verdad es incuestionable, evidente, clara y distinta.
Las Tres Sustancias
Descartes distingue tres sustancias: el yo pensante, Dios y el mundo.
El Yo Pensante
La duda revela la existencia del yo pensante, un alma. Se puede dudar del cuerpo y del mundo (información sensorial), pero no de los pensamientos, de la subjetividad.
La subjetividad es el conjunto de pensamientos, ideas, representaciones. No hay certeza de que correspondan con la realidad. El reto es saber si las ideas sobre el mundo son reales. Descartes clasifica las ideas:
- Adventicias o adquiridas: Provienen de la experiencia sensible, pueden ser erróneas.
- Facticias o artificiales: Invenciones nuestras (ej. centauro).
- Innatas o naturales: Emergen de la facultad de pensar, no de la percepción ni de la invención (ej. Dios, causa, sustancia, número).
Dios, Sustancia Divina
El yo pensante, imperfecto, posee la idea de perfección. La conciencia de imperfección implica la idea de perfección, innata, que es la idea de Dios.