Filosofía y su Relación con el Arte, la Música y la Estética
Filosofía y Literatura
El formato más común en la filosofía es el ensayo, que es lo que utilizan los filósofos a la hora de comunicar sus teorías. En este tipo de escrito, más extenso que un artículo y más breve que un tratado, el autor se centra en un problema concreto. Además, en el ensayo la aportación original del autor tiene que estar bien argumentada.
Los filósofos no han dejado en numerosas ocasiones de servirse de otros géneros como el diálogo, la novela, etc. Son famosos en este sentido los diálogos de Platón, los aforismos de Nietzsche o los poemas de María Zambrano.
Filosofía y Arte
Las artes plásticas y visuales tales como la pintura, la escultura, etc., han servido en muchas ocasiones para comunicar ideas de contenido filosófico. Las artes plásticas, aunque no sean lingüísticas como la literatura o la filosofía, no son completamente ajenas al concepto. Además, son aptas para la metáfora y pueden aportar una aproximación al concepto distinta de la del lenguaje.
Filosofía y Música
Desde sus orígenes, la filosofía y la música han tenido una relación muy estrecha, pues despertó el interés de muchos filósofos de la antigua Grecia. En la antigüedad, Pitágoras descubrió la relación entre la música y las matemáticas. Por otra parte, Platón desarrolló la teoría de la música de las esferas, según la cual los planetas y las estrellas emiten sonidos armoniosos que no podemos oír.
A partir del romanticismo, se destacará la facultad de la música para expresar el mundo interior de una forma superior a como jamás lo podrá hacer el lenguaje hablado. Cabe reconocer que la música, como forma más elevada del arte, constituye la vía de acceso hacia el conocimiento de las verdades más profundas, tal como pensaba Schopenhauer. En el siglo XX, el filósofo Adorno ha elaborado las mayores reflexiones teóricas sobre la música. Adorno se sitúa en una perspectiva crítica. Para Adorno, la música se puede equiparar a otras artes, como el lenguaje construye a partir de la palabra y la música lo hace a partir del sonido.
La Estética: Belleza y Juicio
La estética es una disciplina que tiene por objeto el estudio de la belleza y, de modo especial, las condiciones que hacen bellas las obras de arte.
La Experiencia y Actitud Estética
La estética estudia un tipo especial de experiencia que ciertos objetos logran suscitar, la cual denominamos experiencia estética. A los objetos que tienen la capacidad de despertarnos esa clase de experiencia se denominan objetos estéticos, independientemente de que sean creaciones humanas o naturales. Para que se dé la experiencia estética es necesaria una actitud desinteresada ante el objeto estético, pero no en el sentido de no darle importancia, sino de no pretender obtener provecho o beneficio de él.
El Juicio Estético de Kant
Antes de efectuar un juicio estético, es precioso diferenciar entre nuestra opinión de «me gusta» o «no me gusta» y el juicio estético, que toma como punto de partida la sensación subjetiva de placer o disgusto que nos provoca el objeto más allá de nuestras preferencias personales. Por ejemplo, «Esta obra no me gusta» no estaríamos haciendo un juicio estético; en cambio, si decimos «Esta obra es mala desde un punto de vista artístico», en ese caso sí sería un juicio estético.
No obstante, puede parecer contradictorio reclamar validez universal cuando se reconoce que el punto de partida del juicio estético es una sensación o experiencia individual, pues para Kant no lo es. Según su teoría, es evidente que existe una exigencia de universalidad, ya que no nos resignamos a aceptar que nuestras valoraciones personales se tengan que limitar solo al ámbito personal.
Por el contrario, reclamamos de todos la misma opinión. Para garantizar esta universalidad, Kant recurre al sentido del gusto, que sería subjetivo y, al mismo tiempo, intersubjetivo. Un sentido común que nos permitiría a todos valorar los objetos estéticos de la misma forma, por lo tanto aseguraría la universalidad. Dicho de otra manera, a través del gusto podremos entender y compartir las mismas valoraciones estéticas.
Belleza
Son muchos los que admiten su incapacidad para definir en qué consiste la belleza. Entonces diremos que la belleza es lo que resulta agradable a los sentidos y que causa placer. Todo lo que consideramos bello es indudablemente agradable, pero hay muchas cosas que son agradables y que no consideramos bellas.
Postura Objetivista
La belleza es una cualidad del objeto en virtud de la cual este logra provocar una experiencia estética en las personas que son capaces de acercarse al mismo con la actitud desinteresada que antes hemos comentado.
Postura Subjetivista
No tiene sentido insistir en buscar valores objetivos comunes, porque la belleza depende de la mirada del propio sujeto. Dicho de otro modo, nosotros somos quienes decidimos qué consideramos bello o no, pero lo que realmente merece el calificativo de bello es la emoción o sentimiento que se despierta en nosotros, más que el objeto mismo en cuestión, con lo cual, la belleza no es algo objetivo.