Relaciones entre Filosofía, Religión y Ciencia: Edad Media y Feminismo

Relaciones entre Filosofía, Religión y Ciencia en la Edad Media

Filosofía y Teología

La filosofía se subordinaba a la teología cristiana como ancilla theologiae («sierva de la teología»). San Agustín y Santo Tomás integraron razón y fe, con la revelación divina como guía suprema sobre la razón.

Contexto Histórico del Cristianismo

  • Edicto de Milán (313): libertad religiosa bajo Constantino.
  • Edicto de Tesalónica (380): Teodosio convierte el cristianismo en religión oficial del Imperio Romano.
  • Se censuran textos heréticos y paganos, preservando la ortodoxia cristiana.

Conflictos entre Ciencia y Religión

  • Galileo Galilei (heliocentrismo): condenado por la Inquisición en 1633, vivió bajo arresto domiciliario.
  • Giordano Bruno (universo infinito y múltiples mundos): ejecutado en 1600 por herejía.

La Reforma Protestante

Martín Lutero (1517): critica la corrupción de la Iglesia y defiende:

  • Sola scriptura: obedecer solo a los textos sagrados.
  • La salvación por fe.
  • Surgen nuevas denominaciones: luteranismo, calvinismo, anglicanismo.

Contrarreforma Católica (1545-1563): la Iglesia reafirma su doctrina, refuerza el poder papal y combate el protestantismo.

Pensadores Medievales Destacados

San Agustín

  • Teoría de la iluminación divina: el conocimiento proviene de Dios.
  • Teoría del libre albedrío: el ser humano elige, pero está inclinado al mal por el pecado original.

Guillermo de Ockham

  • Nominalismo: niega los universales como entidades reales; solo existen individuos concretos.
  • Navaja de Ockham: prefiere las explicaciones más simples.

Maimónides

  • Teoría de los atributos negativos de Dios: se describe a Dios solo por lo que no es, para no limitar su infinitud.

Averroes

  • Teoría de la doble verdad: la religión y la filosofía ofrecen verdades distintas pero válidas. La religión satisface a la masa; la filosofía, a una élite intelectual.

Impacto General

Los conflictos entre filosofía, religión y ciencia durante la Edad Media y la Reforma moldearon el pensamiento occidental, estableciendo tensiones y equilibrios entre fe y conocimiento.

Evolución del Feminismo Contemporáneo

El feminismo contemporáneo, como movimiento en constante evolución, se ha desarrollado a lo largo de distintas etapas históricas, conocidas como olas, cada una de ellas marcada por enfoques y prioridades específicas en la lucha por la igualdad de género.

Primera Ola: Derechos Civiles y Educación para la Mujer

La primera ola, que abarcó desde finales del siglo XVIII hasta principios del XIX, se centró en la obtención de derechos civiles fundamentales para las mujeres, como la educación, la igualdad legal y, finalmente, el derecho al voto. Mary Wollstonecraft, con su obra Vindicación de los derechos de la mujer (1792), se erige como una figura clave. Wollstonecraft refutó las ideas de pensadores como Rousseau, quien sostenía que las mujeres eran emocionalmente débiles e intelectualmente incapaces de participar en la vida pública, justificando su confinamiento al ámbito doméstico.

Wollstonecraft argumentó que las mujeres son seres racionales y que su exclusión de la educación y los derechos cívicos se debía a prejuicios de la sociedad patriarcal, no a una desigualdad inherente. Planteó que una sociedad justa debía proporcionar igualdad de oportunidades educativas y abogó por el desarrollo de las mujeres como ciudadanas activas y responsables. Su obra marcó un hito ético y filosófico para las futuras generaciones feministas.

Segunda Ola: Existencialismo, Liberación Sexual y Construcción del Género

La segunda ola, que alcanzó su apogeo en las décadas de 1960 y 1970, amplió el alcance del feminismo para abordar cuestiones como la sexualidad, la familia, el trabajo remunerado, la violencia doméstica y, especialmente, la construcción social de los roles de género. Simone de Beauvoir, con El segundo sexo (1949), introdujo ideas fundamentales sobre cómo la sociedad define la identidad femenina.

Beauvoir propuso que la feminidad no es una esencia biológica, sino un rol social impuesto, afirmando que «no se nace mujer, se llega a serlo». Su análisis de la mujer como «el Otro», una categoría subordinada al hombre, reveló cómo la cultura patriarcal condiciona a las mujeres hacia la dependencia y pasividad. Además, desmontó el mito de la «eterna feminidad», una construcción que idealiza y restringe a las mujeres dentro de estereotipos de pureza, docilidad y cuidado. La obra de Beauvoir sentó las bases para una crítica radical de los roles de género como construcciones sociales transformables.

Tercera Ola: Interseccionalidad, Teoría Queer y Performatividad

La tercera ola, que surgió en los años 80 y 90, se caracterizó por un feminismo más inclusivo, que integró cuestiones de raza, clase, orientación sexual y teoría queer. Este periodo enfatizó la interseccionalidad, un concepto popularizado por Angela Davis, quien destacó cómo las diferentes formas de opresión, como el racismo, el clasismo y el sexismo, están interrelacionadas. Davis criticó el sistema penitenciario estadounidense como perpetuador de la opresión hacia las minorías raciales y de clase, subrayando que las mujeres negras y trabajadoras enfrentan desafíos diferentes a los de las mujeres blancas de clase media.

Por su parte, Judith Butler introdujo el concepto de performatividad del género en El género en disputa (1990). Butler argumentó que el género no es una identidad fija, sino una serie de actos repetitivos que construyen la percepción de una identidad estable. Según Butler, el género no es algo que se «tiene» o «es», sino algo que se «hace». Esta perspectiva abrió nuevas posibilidades para subvertir las normas de género y desafiar la heteronormatividad, permitiendo resistencias que transformen las estructuras patriarcales.

Feminismo Contemporáneo: Diversidad e Inclusividad Radical

El feminismo contemporáneo adopta una postura aún más inclusiva y crítica respecto a las normas de género y sexualidad. Paul B. Preciado es una figura destacada en esta etapa, enfocándose en las identidades de género, la disidencia sexual y la despatologización de la diversidad de género. En Dysphoria Mundi (2022), Preciado critica cómo la sociedad ha medicalizado y marginado a las personas trans y no normativas, proponiendo que estas identidades deben entenderse como expresiones válidas de la diversidad humana.

Preciado argumenta que la disforia de género no es un trastorno, sino una forma de resistencia a un sistema de género opresivo que impone categorías rígidas. Aboga por una inclusividad radical que celebre la multiplicidad de expresiones de género y rechace las categorías fijas. Este enfoque contemporáneo del feminismo no solo busca desmontar las normas patriarcales, sino también construir una sociedad que respete y celebre la pluralidad de identidades y formas de vida.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *