René Descartes: El Padre de la Filosofía Moderna

Epistemología

Descartes marcó el comienzo de la filosofía moderna al independizar el pensamiento de la teología y hacer inseparables la verdad y la autoconciencia. Definió la razón como»lumens naturales«, sinónimo de buena mente.

Ante los errores filosóficos anteriores, Descartes propuso el método deductivo de las matemáticas como el más adecuado para la búsqueda de la sabiduría. Este método, conocido como el método cartesiano, se expone en las Reglas para la dirección del espíritu, donde presenta 21 reglas que reduce a cuatro:

  1. Regla de la evidencia: No recibir jamás por verdadera cosa alguna que no se reconozca evidentemente como tal.
  2. Regla del análisis: Dividir cada una de las dificultades que examine en tantas partes como sea posible y necesario para resolverlas mejor.
  3. Regla de la síntesis: Conducir por orden mis pensamientos, comenzando por los objetos más simples y fáciles de conocer, para subir poco a poco hasta el conocimiento de los más complejos.
  4. Regla de la enumeración: Hacer en todo enumeraciones tan completas y revisiones tan generales que quede seguro de no omitir nada.

Metafísica

Para encontrar otras verdades, Descartes indagó dentro del propio sujeto, donde encontró las ideas, objeto de sus pensamientos. Las ideas del yo pensante son de tres tipos:

  • Ideas adventicias: Proceden de la experiencia externa y pueden resultar erróneas.
  • Ideas facticias: Construidas por la mente de forma arbitraria.
  • Ideas innatas: Emergen de la propia facultad de pensar y son las únicas que sirven para descubrir otras realidades.

Estas ideas innatas corresponden a las tres sustancias:

  1. Res cogitans (yo pensante): El ser humano es un conjunto de dos sustancias. La res cogitans (alma, pensamiento) es inmortal y se caracteriza por obrar libremente. Es la conciencia, el conjunto de pensamientos, ideas y representaciones que existen en el yo.
  2. Res infinita (Dios): Idea innata que posee el yo pensante. No puede ser adventicia porque no hay experiencia directa de Dios. Permite afirmar que fuera del yo pensante hay una realidad extramental, que es precisamente la idea innata de Dios. Descartes asegura la existencia de Dios mediante tres argumentos: el principio de causalidad, el único ser necesario y el argumento ontológico de San Anselmo.
  3. Res extensa (el mundo): Lo heterogéneo dado a los sentidos es lo complejo, que debe ser analizado por la razón y reducido a partes simples. Descartes propone el mecanicismo, que implica la aplicación del método cartesiano a la materia. Los cuerpos deben ser explicados desde las únicas propiedades que somos capaces de entender de forma clara y distinta.

Ética

La ética cartesiana se centra en el control de las pasiones mediante la prudencia. Presenta una moral provisional que debe seguir una serie de reglas:

  • Obedecer las leyes y costumbres del país.
  • Seguir con decisión las resoluciones tomadas.
  • Ocuparse de aquello que está en las manos de uno y desentenderse de lo que nos sobrepasa.

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