Para Rousseau hay un conflicto entre la conciencia moral, cuyas pasiones e instintos innatos le hacen desear ser feliz, y la sociedad, que es el resultado de las relaciones humanas de dominio en la que es educado. Interpreta que el origen del género humano está en la sociedad. Inventa el modelo de la bondad natural del ser originario en el estado de naturaleza. Diseña la transformación de los seres humanos y nuestras instituciones mediante la educación individual y la educación política del contrato social. Rousseau juzga a la sociedad ilustrada que sustituye el mundo antiguo con su vinculación a la naturaleza, el poder atenta contra la dignidad humana ya que compra la libertad de los seres humanos a cambio de su seguridad, seduciéndolos con los discursos de los ilustrados. El hombre moderno vive en la máscara de querer ser bien visto en la sociedad, pierde así su libertad sometido a las convenciones externas, el arte de hablar bien pero los temores, el odio y la traición se esconden continuamente bajo esa máscara que llamamos educación. La vanidad y la apariencia contribuyen al éxito social. Las relaciones entre los humanos no son sinceras ya que ocultan la realidad. Contra esto, Rousseau postula volver a la simplicidad, la inocencia y la pobreza que son los únicos bienes que pueden traernos la felicidad. Criticaba así la fe del progreso, poniendo en duda que las ciencias y las artes pudiesen liberar al ser humano de la opresión y la infelicidad.
La conclusión a la que llega Rousseau sería no se puede volver a la inocencia de un estado natural. Se deberán cambiar las falsas relaciones que han generado desigualdad moral entre los hombres, siguiendo los principios del corazón y de la razón. Se debe iniciar la investigación del hombre originario, conociendo lo que es el ser humano, su condición, su naturaleza…, para saber si las desigualdades sociales responden a una ley natural. El Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres distingue dos partes: El ser humano en estado natural hipótesis vive. Características del individuo en el estado natural:
– Libertad natural, limitada por la fuerza de cada hombre.
– Dependencia del instinto y del deseo. Es feliz porque no le falta de nada.
– Derecho a la posesión de todo lo que se quiera y se pueda tener.
– Tiene dos pasiones, el amor a sí mismo y la piedad
Nadie somete a nadie y no tiene sentido la ley del más fuerte.
– El hombre es libre y vive aislado, esto es, no es por naturaleza sociable, como creía Aristóteles, sino que la sociedad surge a partir de un contrato con los individuos que deciden formarla.
El paso del estado de naturaleza al estado social:
Se establece la desigualdad a causa de la propiedad privada mediante la que surgen relaciones de dependencia económica, ambiciones, guerra de todos contra todos, imposición de los ricos, creación de instituciones política y despotismo. Este orden social es ilegítimo y la base de todos los males. Según Rousseau, la propiedad se atribuye a la condición humana cuando es resultado de la historia de la sociedad.
El amor de sí, es sustituido por el amor propio, entendido como la pasión artificial que lleva a los hombres a ser más que los demás, fomentando la envidia y el orgullo.
El contrato social el contrato social es el pacto por el que los hombres salen del estado de naturaleza y enajenan o ceden sus derechos al monarca, o al gobierno renuncian a su libertad. Rousseau, rechaza este contrato de enajenación y propone un nuevo modelo de contrato social que protege la libertad de cada individuo porque se basa en un pacto entre iguales. Quiere transformar la sociedad mediante un pacto que respete la libertad de los hombres y legitime el poder. Para ello, es necesario organizar una sociedad de manera que cada individuo, al asociarse a los demás, se una a todos, pero no se obedezca más que a sí mismo, quedando tan libre como antes. Para lograr este objetivo, propone una forma de contrato que vincula la comunidad con el individuo y, a la inversa. Así, cada asociado se une a todos y a nadie en particular.
contrato libre, que, aunque no permite recuperar por completo la libertad natural, sí garantiza el máximo grado de libertad civil, en el marco de un Estado de derecho. Así el pueblo soberano establece el poder del Estado para garantizarse a sí mismo la libertad: esto es el contrato social que transforma al ser humano en ciudadano. El contrato social crea la voluntad general, que es colectiva, soberana e inalienable, y tiene como objetivo el bien común. Las leyes y el gobierno significan la puesta en ejercicio de la libertad general, es decir, de la soberanía del pueblo o asamblea. El gobierno elegido ha de ocuparse de ejecutar las leyes que emanan de la voluntad general, de manera que si se opone, puede ser sustituido.
Emilio o sobre la educación. Propone una revolución del sistema educativo, que respete la libertad del niño, evitando cualquier imposición externa, cuyo objetivo sea liberarlo de falsos prejuicios. Enumera unos principios educativos básicos:
Aceptar al niño como tal: sin considerarle hombre o mujer a partir de su identidad. Los castigos no sirven.Tomar al niño como sujeto de la educación: el niño tiene que educarse solo, dejándole libertad y siendo así feliz.La educación tiene su propio ritmo: no hay que obligar a un avance mayor. La naturaleza llega siempre a su fin sin retrasos ni adelantos. Las características de la educación son:Bondad natural: condición humana que hay que proteger de la sociedad.Hay que educar al niño en libertad y en la naturaleza.La igualdad es un derecho natural y la desigualdad social ha sido producida por la educación.El objetivo primero es hacer un ser humano, después crear una familia, y por último, un ciudadano.Tiene que atender a la moral y a la religión.