Kant.NOCIÓN 1: Metafísica y ciencia
.La relación entre metafísica y ciencia es el tema central de la Crítica de la razón pura: la metafísica aún no es ciencia y la gran tarea es conseguir constituirla como tal. La cuestión central dela filosofía de Kant esqué podemos conocer.Kant comienza afirmando que hay un conocimiento riguroso: la ciencia. Solo tres disciplinas se han constituido en ciencia: la geometría, la lógica y la física. Pero, ¿puede la metafísica convertirse en ciencia? Esto no solo afecta a la metafísica, sino que afecta a todo el conocimiento humano y a los intereses más profundos de la razón.Kant define la metafísica como el “conocimiento especulativo de la razón, completamente aislado, que se levanta enteramente por encima de lo que enseña la experiencia, con meros conceptos”. Siguiendo a los racionalistas, Kant considera que la metafísica tiene un atrio donde se exponen las nociones básicas de ella (generalis), y la metafísica propiamente dicha (specialis), que es el estudio de sus tres objetos: mundo, alma y Dios. ¿Cómo solucionar la cuestión de qué podemos saber? Las dos grandes soluciones del momento (el Racionalismo y el Empirismo) eran insuficientes, por eso, Kant busca un nuevo método: la crítica, que consiste en investigar las condiciones de la ciencia. Así, si conocemos sus condiciones, podremos saber si la metafísica puede cumplirlas. Cuando ha escrito la Crítica de la razón pura, Kant que se da cuenta de que sólo la metafísica generalpuede convertirse en ciencia. Respecto al estudio de Dios, alma y mundo, la crítica kantiana demuestra que es imposible: no hay intuición sensible de Dios, del alma o del mundo. Así, la metafísica nunca podrá constituirse como ciencia.NOCIÓN 2: Experiencia y conocimiento a priori.
Frente al hecho de que la metafísica no era auténtico conocimiento, Kant utiliza la crítica, para establecer las condiciones del conocimiento científico. Kant sostiene que, para que un conocimiento sea científico, se requiere: 1) que incremente nuestros conocimientos, y 2) que sea universal y necesario.En los juicios analíticos, el predicado está ya contenido en el sujeto y, por tanto, no aportan conocimiento. En los juicios sintéticos, el predicado no está contenido en el sujeto, por tanto, hay una novedad en el conocimiento. Pero son juicios de experiencia, yla experiencia jamás puede darnos universalidad y necesidad. Kant concluye entonces que el juicio científico tiene que ser sintético, pues es el único que aporta nuevos conocimientos, pero, dado que la necesidad no puede proceder de la experiencia, establece que procede del entendimiento, o sea, es anterior a toda experiencia, es a priori. Así, Kant llama a los juicios científicos juicios sintéticos a priori. Así, tenemos ya las dos clases de elementos esenciales del conocimiento kantiano: la experiencia (a posteriori) y lo a priori. Kant afirma que “todo nuestro conocimiento comienza con la experiencia”, algo nos es dado desde el exterior y afecta a nuestros sentidos constituyendo la materia bruta del conocimiento. Kant llama a esa experiencia intuición empírica. Ahora bien, “aunque todo nuestro conocimiento empiece con la experiencia, no por eso procede todo él de la experiencia”. Eso que no procede de la experiencia es puesto por el sujeto, es a priori. Se trata de la forma que conforma y ordena la materia bruta, a lo que Kant llama formas a priori. Ya tenemos los dos elementos que compondrán todo conocimiento: la materia (lo recibido, a posteriori) y la forma (lo puesto por el sujeto, a priori).La gran tarea a que se enfrenta Kant ahora es determinar qué es lo que procede de la experiencia y qué es lo que pone el sujeto (lo a priori). TEMA 1: Teoría del conocimiento.Según Kant, el verdadero estadio de la razón es el crítico.La filosofía tiene que ser entendida como una ciencia que tiene por objeto de estudio la razón humana. Para ello, tomamos la razón en su uso puro, sin contaminación de la experiencia, y extraemos de ella los principios racionales que rigen la estructura del conocimiento. El conocimiento científico consta de juicios universales y necesarios, y además, incrementa el conocer.En los juicios analíticos, el predicado está ya contenido en el sujeto y, por tanto, no aportan conocimiento. En los juicios sintéticos, el predicado no está contenido en el sujeto, por tanto, hay una novedad en el conocimiento. Pero son juicios de experiencia, yla experiencia jamás puede darnos universalidad y necesidad. Kant concluye entonces que el juicio científico tiene que ser sintético, pues es el único que aporta nuevos conocimientos, pero, dado que la necesidad no puede proceder de la experiencia, establece que procede del entendimiento, o sea, es anterior a toda experiencia, es a priori. Así, Kant llama a los juicios científicos juicios sintéticos a priori. Llegamos así al punto más importante: una vez establecido que el saber científico está constituido por juicios sintéticos a priori, si descubrimos cuál es el fundamento de la síntesis a priori podremos resolver todos los problemas concernientes al conocimiento humano. En suma, podremos establecer cuál es el valor y cuáles son las limitaciones del conocimiento humano. Esto es lo que Kant se propone hacer mediante su Crítica. Kant, mediante su «revolución copernicana», consiguió descubrir por qué la metafísica siempre ha permanecido en una fase precientífica. Hasta aquel momento se había intentado explicar el conocimiento suponiendo que era el sujeto el que debía girar alrededor del objeto; sin embargo,
Kant supone que no es el entendimiento el que debe regularse a los objetos para extraer los conceptos, sino al revés: los objetos, en cuanto que son pensados, deben ajustarse a los conceptos del intelecto y concordar con ellos. Se pone en claro así cuál es, para Kant, el fundamento de los juicios sintéticos a priori: es el sujeto con las leyes de su sensibilidad y de su entendimiento.El término «trascendental»es básico en la Crítica de la Razón pura. Los modos de conocer a priori del sujeto son la sensibilidad y el entendimiento; Kant califica las estructuras de éstos trascendentales.
CONTEXTUALIZACIÓN.Immanuel Kant vivíó en el Siglo XVIII, en Prusia Oriental. Es el siglo de las Luces, con innumerables cambios científicos, sociales y políticos. Para el texto que comentamos, lo más relevante es el triunfo indiscutible de la nueva ciencia: la física de Newton era considerada el paradigma científico. Esto llevará a Kant a buscar cómo convertir la metafísica en ciencia: sacarla de su estado precientífico y llevarla al científico. Esa es la gran tarea presente en toda su obra especulativa y práctica. En el continente, la filosofía racionalista (Leibniz y Wolff) representaba la cumbre de la filosofía, pero, en Inglaterra, el Empirismo (Hume) se abría paso como una nueva interpretación de la ciencia y del conocimiento. Al inicio, Kant seguiría principalmente la filosofía racionalista, pero luego, despertado por Hume de su sueño dogmático (=racionalista), haría una síntesis superadora entre Racionalismo y Empirismo.En el plano general de las ideas, había surgido una nueva concepción: la Ilustración. El hombre se constituía en el centro del universo y en medida de todo conocimiento. La autoridad, la monarquía, las iglesias cedían paso a la razón y al nuevo orden dependiente de la ciencia y del sujeto humano autónomo. Esta nueva concepción será decisiva para explicar el giro copernicano de Kant: el hombre es el centro en torno al cual y a partir del cual se constituye todo conocimiento teórico (ciencias y metafísica) y práctico (moral y política). La moral, el conocimiento de Dios, el poder político… tienen validez sólo si encuentran apoyo en el sujeto autónomo: en el factumdel deber o como condición de posibilidad del mundo humano (Dios, alma, libertad), etc. La vida de Kant, desde el punto de vista externo, es una vida “aburrida”. Apenas salíó de Königsberg, donde nacíó y murió. Rechazó puestos académicos, políticos y honores, que le hubieran dado fama y dinero, pero distraído de su investigación. No obstante, no descuidó las polémicas teoréticas y prácticas de su época y siempre tuvo máximo interés por todos los acontecimiento históricos en que vivíó (revolución francesa, independencia de América, caída del ancien régime, etc.). Tuvo amplísimos conocimientos de filosofía, física, matemáticas, ética y política, e intervino en todas las cuestiones relevantes de su época. Kant recibíó una educación clásica y severa (latín, filosofía, matemáticas, física, pietismo…), y en filosofía fue discípulo de Albert Schulz, una gran figura del Racionalismo. Tras varios años de docencia precaria, ganó la cátedra de Lógica y Metafísica gracias a su Disertación sobre la forma y principios del mundo sensible y del inteligible (Dissertatiode 1770). Esto le dio, por fin, el tiempo que necesitaba para trabajar en sus grandes obras. Su pensamiento puede dividirse en dos etapas: periodo precrítico (hasta 1770) y periodo crítico (de 1781 a su muerte). a) Periodo precrítico. La primera parte de este primer periodo (hasta 1760) se caracteriza por su dedicación a la física. Escribe Historia natural universal y teoría de los cielos (1755), donde defiende la física de Newton. A partir de 1760 se va dedicando más intensamente a la metafísica en busca de una fundamentación última de la física. En esta segunda parte del periodo precrítico (1760-70), emprende una crítica contra el Racionalismo (su propia filosofía). Escribe Sueños de un visionario aclarados con los sueños de la metafísica (1765), donde Kant muestra, como él mismo diría más tarde, haberse despertado de su sueño dogmático. La reflexión de este periodo culmina en la Dissertatio de 1770, donde Kant establece una clara diferenciación entre lo sensible y lo inteligible, y establece la subjetividad del tiempo y del espacio, que serán piezas maestras de su filosofía crítica. b) Periodo crítico. En 1770 Kant deja de publicar y dedica 11 años a la redacción de su obra fundamental. En 1781 publica la primera edición de la Crítica de la razón pura, donde expone los fundamentos de su pensamiento crítico. Esta es indudablemente su obra cumbre y con ella comienza su periodo crítico. Como esta primera edición pasó inadvertida, en 1783 publicó un resumen: Prolegómenos a toda metafísica futura, que sí tuvo éxito, y ya en 1787 publicó la segunda edición de la Crítica de la razón pura. A este texto pertenece el fragmento que comentamos sobre el problema de la metafísica y la cuestión de cómo convertirla en ciencia. Otras obras son Fundamentación de la metafísica de las costumbre (1785), Crítica de la razón práctica (1788), Crítica del juicio (1790), La religión dentro de los límites de la razón (1793) y Opus postumum (publicado en 1820). Entre sus obras de filosofía política, destaca A la paz perpetua, donde propone un esbozo de comunidad política que ha influido en nuestra actual concepción política. Respecto al marco de la obra a que pertenece, este texto corresponde al prólogo de la segunda edición (1787) de la Crítica de la razón pura. La idea kantiana es que la matemática y la física han conseguido entrar en el camino seguro de la ciencia. Sin embargo, no así la metafísica. Por eso, aunque esta obra pueda dar la impresión de que es una crítica a la metafísica en general, lo que en ella hace Kant es criticar la metafísica racionalista y convertir la metafísica en ciencia, aunque no toda. El texto que comentamos toca precisamente este núcleo de toda la obra kantiana: diagnóstico sobre los saberes que se han convertido en ciencia (matemática y física) y sobre los que no han entrado por este camino (la metafísica), causas de esta situación y la solución kantiana para la metafísica (el giro copernicano). ,
Realizada esta tarea en el prólogo, el resto de la obra es una exposición detallada de la nueva metafísica (la crítica kantiana) a partir de las dos fuentes del conocimiento: la estética transcendental (teoría de la sensibilidad: construcción del fenómeno a nivel sensible) y la lógica transcendental (teoría del conocimiento intelectivo), en sus dos ámbitos: el conocimiento de los objetos científicos (analítica transcendental) y crítica del acceso a lo transfenoménico (Dios, alma, mundo: la dialéctica transcendental). Es importante la segunda parte de esta obra, tantas veces olvidada: la doctrina transcendental del método. En ella, Kant introduce la distinción entre razón teórica y razón práctica, y establece las condiciones últimas de la moralidad (la existencia de Dios, la inmortalidad del alma y la libertad de la voluntad). Por último, mencionemos la influencia de Kant en la historia. El influjo de este pensador ha sido enorme, no sólo en filosofía, sino también en muchos ámbitos del pensamiento. Para muchos, Immanuel Kant es el pensador más influyente de la modernidad. Las principales corrientes filosóficas de los siglos XIX y XX serán deudoras del pensamiento kantiano. En concreto: 1) El idealismo alemán del XIX, con sus más importantes representantes, Fichte, Schelling y Hegel, depende directamente de él en su punto de arranque. Su inicio es la solución al problema del alcance ontológico de las categorías kantianas: ¿en qué medida la realidad es cómo dicen los juicios sintéticos a priori? 2) En esos dos siglos –sobre todo a inicios del XX–, aún tenemos estrictos discípulos de Kant. Son los llamados neokantianos, que forman fundamentalmente dos escuelas: Marburgo y Baden. La escuela de Marburgo se centró en cuestiones epistemológicas y la de Baden en temas sociales y antropológicos. Esta última influyó mucho en la formación de la Antropología del Siglo XX. 3) La Filosofía de la ciencia del Siglo XXse inspira directamente en Kant: la idea central es que no conocemos lo que son las cosas en sí, sino sus aspectos fenoménicos, que ordenamos mediante construcciones mentales nuestras. No conocemos qué es un perro en sí, sino su masa, tamaño, composición química, etc. 4) En ética y política, la influencia de Kant en el Siglo XX ha sido enorme. Todas las éticas del Siglo XX han asumido la centralidad de la dignidad de la persona tal como la formula Kant. La doctrina de los derechos humanos tiene una clara raíz kantiana. Además, las éticas formales y las éticas dialógicas dependen directamente de él. Ésta última es una adaptación de los principios kantianos a las actuales sociedades democráticas. Entre los autores que reciben su influencia están Habermas y Rawls. 5) En sociología, ha influido en autores de gran relieve como Max Weber.