TEMA 12: Fundamentos filosóficos del Estado
1. Fundamentos filosóficos del Estado
Los seres humanos no vivimos aislados los unos de los otros, sino que estamos integrados en grupos que constituyen lo que llamamos sociedad.
En todas las sociedades existen una serie de intereses y objetivos que generan relaciones entre sus miembros. La complejidad de estas relaciones obliga a la dotación de una organización.
1.1. El origen de la sociedad
→Origen natural:
los seres humanos poseen una inclinación natural a asociarse entre sí. Aristóteles decía que nadie nace verdaderamente humano si uno nace y crece en sociedad.
→Origen divino
El universo fue creado y ordenado por Dios y la sociedad es parte de esa creación. Esta explicación fue dominante durante mucho tiempo.
Juan de Salisbury decía que la sociedad tiene un alma y un cuerpo: el alma es la autoridad eclesiástica y el cuerpo la civil.
→Origen contractual:
la sociedad nace debido a un consenso entre sus miembros, que descubren las ventajas de la convivencia.
El consenso dará lugar a un contrato que consolide el acuerdo y quedará plasmado en las leyes e instituciones que conformen la sociedad. Esta opción fue defendida por sofistas y griegos, aunque las principales teorías se elaboraron en los siglos XVII y XVIII.
1.2. Elementos de la organización política. Estructuras e instituciones que forman parte de la organización política.
→La sociedad civil está formada por las personas que actúan dentro de grupos para defender intereses comunes y promover acciones colectivas que redunden en beneficio.
→La sociedad política está constituida por todas las instituciones creadas con el fin de garantizar el funcionamiento y la pervivencia de una sociedad.
→Un Estado es un tipo de sociedad política que incluye la forma de organización social, económica y política que regula la vida comunitaria. Las carácterísticas que lo diferencian de otras formas de sociedad son la delimitación del territorio, la formulación de las normas y leyes y el establecimiento de relaciones con otros estados.
→Una nacíón es una entidad compleja formada por un territorio y sus habitantes, y entre estos existen lazos culturales, que pueden ser de unidad lingüística, religiosa, étnica o histórica, reconocidas por quienes pertenecen a la misma.
→Un régimen político es la forma de gobierno que adopta un determinado Estado. Cada uno establece cómo se ejerce y se transmite el poder dentro del mismo.
→Un gobierno es la institución del Estado que cuenta con el poder político, es decir, con la capacidad de tomar decisiones que afectan a la organización de la sociedad. Podemos distinguir dos modos de elegir un gobierno:
⇨Gobierno democrático:
es elegido por aquellos a quienes va a gobernar.
⇨Gobierno no democrático:
el gobierno accede al poder sin tener en cuenta la voluntad de la sociedad.
1.3. Carácterísticas de la organización política
Las instituciones necesitan unas cualidades e instrumentos que les permitan ejercer su labor y mantener la cohesión social. Las cualidades de las instituciones políticas son las siguientes:
→La soberanía es la capacidad de decidir sobre un territorio determinado. Dependiendo de las ideologías políticas, la soberanía puede recaer sobre un único individuo elegido por Dios.
→El poder político es la capacidad que tiene un individuo o grupo para tomar decisiones, influir en ellas o evitar que otros tomen decisiones que afectan al conjunto de la sociedad. El poder político se plasma en leyes que todos debemos cumplir y cuyo incumplimiento trae consigo castigos.
→La autoridad es el derecho a influir en los demás cuando el poder es reconocido y aceptado por los que reciben las obligaciones. Weber ofrecíó la siguiente clasificación de los tipos de autoridad que son efectivos en la política:
⇨Autoridad carismática:
admiración que despiertan determinadas personas, que hacen creer que están dotados de cualidades especiales para ser líderes. Un ejemplo de esta autoridad son Julio César, Hitler y Gandhi.
⇨Autoridad tradicional:
se basa en la creencia de que ciertas costumbres merecen un respeto especial debido a su antigüedad. Ejemplo: el patriarcado.
⇨Autoridad legal-racional
Obliga a respetar las leyes e instituciones que emanan la soberanía popular por medio de procedimientos regulados. Es el caso de las sociedades democráticas actuales.
→La legitimidad consiste en el derecho a ejercer el poder en un régimen político. Es una cualidad fundamental para mantener la estabilidad social.
→La legalidad consiste en la actuación acorde a las leyes. Afecta por igual al conjunto de la sociedad.
2. Formas de organización política
A lo largo de la historia se han realizado múltiples clasificaciones de las formas de gobierno. La clasificación de Aristóteles combina dos criterios: el número de gobernantes y la manera de gobernar, obteniendo como resultado seis tipos de organización política:
Gobierna una sola persona | Gobiernan varios | Gobiernan todos | |
Gobierno justo. El que gobierna persigue el bien común | Monarquía | Aristocracia | Democracia |
Gobierno injusto. El que gobierna persigue su propio bien | Tiranía | Oligarquía | Demagogia |
Marx propuso una clasificación que pretendía ser una sucesión histórica de las formas de organización social que han existido. Su propuesta fue:
→Modelo asíático
El emperador era propietario de la mayoría de bienes (vías de comunicación, agua) y permitían acceder a los beneficios propios según su criterio. La población beneficiada contribuía mediante tributos. (Egipto y Babilonia)
→Modelo esclavista
La sociedad se dividía en ciudadanos y no ciudadanos. Los ciudadanos (amos) podían ostentar la propiedad de los que no lo eran (esclavos). La producción dependía de los esclavos, pero esta era propiedad de los amos. (Antigua Grecia y Roma)
→Modelo feudal
La sociedad se dividía en nobles y vasallos. Unos eran propietarios de las tierras y las cedían a los otros. Cultivaban tierra y cedían parte de los beneficios a cambio de protección.(E.M.)
→Modelo capitalista.
La sociedad se divide en capitalistas y proletarios. Los capitalistas son propietarios de los medios productores de riqueza y los proletarios venden su capacidad de producción a cambio de un salario. Con el paso del tiempo han dado lugar a nuevos modelos capitalistas:
⇨Estado liberal:
el capital fluye, se produce una gran creación de empresas y no hay numerosos impuestos.
⇨Estado socialista
Defiende la propiedad privada.
⇨Estado social y de derecho:
El Estado tiene injerencia sobre los capitales respecto a los impuestos, que son muy altos.
3. Ideas políticas en la Antigüedad y el Renacimiento
La reflexión filosófica sobre la política se inició en el siglo V a.C. Y ha permanecido a lo largo de la historia, intentando mejorar la organización de la sociedad.
3.1. El convencionalismo de los sofistas
Los sofistas fueron los primeros en llamar la atención sobre el hecho de que la organización política de una sociedad es independiente de la organización que posee la naturaleza en su conjunto, debido a que la sociedad depende de decisiones humanas y la naturaleza es ajena a estas mismas. Estos distinguieron dos tipos de leyes:
→Physis.
Es la ley natural, impuesta por la naturaleza y a la que los seres naturales deben someterse, el ser humano no puede cambiarla.
→Nomos
Ley política que regula las relaciones entre los seres humanos dentro de una sociedad. Puede ser cambiada si así lo acuerdan sus miembros.
Esta distinción llevó a los sofistas a formular su doctrina del convencionalismo.
Según el convencionalismo, las normas políticas son fruto de un pacto entre los miembros de la sociedad, y este pacto es el que le otorga validez.
Las normas políticas son fruto de un acuerdo, pero los sofistas sosténían que no existe ningún grado social superior a ese acuerdo entre los miembros que sirva para dar validez a una norma o comparar normas de distintas sociedades para juzgar si una es mejor que otra. El convencionalismo los condujo a una posición relativista que daba por buena cualquier organización política elegida por los miembros de la misma.
Los sofistas no teorizaron sobre un modelo de sociedad ideal, pero reflexionaron sobre la forma de sacar partido a la forma de Gobierno con la que le había tocado vivir. En la sociedad ateniense, enseñaron oratoria para convencer a los demás.
3.2. La justicia según Platón
Platón fue contemporáneo de los sofistas, elaborando una teoría alternativa al convencionalismo. Este planteó la existencia de entidades perfectas sólo captables con la razón, que eran modelos a los que debían parecerse todas las realidades del mundo sensible.
En particular para Platón, existe la justicia perfecta y la justicia en sí.
Todas las acciones, normas, organizaciones deben compararse con esa justicia perfecta para determinar en qué medida se acercan o se alejan de la misma. Esta tesis sostiene que sí existe una única forma perfecta y justa de Gobierno, y que todas las demás se ordenan en función de lo que se parezca o no a la misma.
La justicia en sí consiste en el perfecto ordenamiento de las partes de un todo. Aplicado a la convivencia, esto significa que una sociedad es justa cuando cada miembro realiza a la perfección la actividad que le es propia.
Para Platón, en toda sociedad hay tres necesidades fundamentales que deben de ser atendidas: gobierno, defensa y económicas. Cada una de esas necesidades debe ser atendida mediante un reparto de tareas, así que, una sociedad será justa cuando:
→Los gobernantes sean los mejores capacitados para gobernar y se hayan preparado para ello. Cualidad Importante:
Prudencia
→Los militares y la policía serán los mejores capacitados para las tareas de defensa frente a agresiones externas y disturbios internos. Cualidad Importante:
Valor
→Los productores y los comerciantes serán quienes cubran las necesidades materiales y rentabilicen los recursos disponibles. Cualidad Importante:
Templanza
El modelo que propone Platón es etimológicamente aristocrático, ya que el término denominaría a este gobierno como el gobierno de los mejores.
La aristocracia que entendíó Platón no debe ser hereditaria.
Él propónía que se estableciera un procedimiento para seleccionar a los niños que tuvieran mejores dotes para el gobierno y se diseñara un plan educativo para ellos. Así, de adultos estarían perfectamente capacitados.
3.3 La filosofía política en la Edad Media
La reflexión filosófica durante la Edad Media estuvo muy influida por el cristianismo. El pensamiento político medieval es el siguiente.
→Creación:
El universo es creación divina y las obras humanas deben encaminarse a glorificar al Creador.
→Culpa:
Los seres humanos se apartaron de Dios e incurrieron en el pecado del que ahora tienen que redimirse.
→Salvación:
El fin de la obra humana debe ser la restitución del orden divino y el retorno con Dios.
De esta concepción se extraerán una serie de ideas que actuarán en todas las propuestas de filosofía política durante esta época, que son las siguientes:
→Convivencia en la sociedad de dos órdenes que disponen de organizaciones separadas:
⇨El orden espiritual es gestionado por la Iglesia, con el Papa a la cabeza.
⇨El orden terrenal administra los asuntos no vinculados directamente con la religión, requiriendo de una estructura y organización diferente
→Superioridad de la autoridad espiritual sobre la terrenal. No pueden entrar en conflicto ya que son las mismas personas las que forman parte de ambos ámbitos y el fin que persiguen ambos es el mismo. Si existiera un conflicto, la autoridad espiritual prevalecerá sobre la terrenal.
→Preferencia por un modelo político jerárquico.
Estructura piramidal con Jesucristo en la cima, la curia eclesiástica por debajo y, finalmente, los feligreses. El orden terrenal intenta imitar el orden de la iglesia, así que considera la monarquía como el sistema de gobierno más adecuado.
→Atención especial a los fines que persigue la sociedad.
Anteriormente, la reflexión política se centraba en el origen y el fundamento de la sociedad. Los pensadores medievales añadieron otro asunto más, el fin que debe perseguir esa sociedad. Ese fin debe centrarse en facilitar a los humanos su retorno a Dios tras cometer el pecado, siendo este el criterio político de más importancia.
3.4. El Realismo político: Maquiavelo
Maquiavelo es considerado el padre de la ciencia política porque fue el primero en separar la política de la ética. Este quiso saber cómo son las cosas en política y no cómo deben ser; quiso conocer las formas de gobierno existentes, su transcurso por el tiempo y cuál es mejor para una determinada sociedad. Sus investigaciones lo llevaron a una serie de conclusiones referidas a la Italia de su época (Siglo XV). Estas son sus conclusiones más importantes:
→ La mejor forma de gobierno fue la república romana.
El equilibrio que establecíó entre los distintos poderes redujo el riesgo de abuso de poder, favorecíó la participación ciudadana y contribuyó a salvaguardar la libertad.
→Todas las formas de gobierno están sometidas a la ley de la decadencia histórica.
Las monarquías degeneran inexorablemente en tiranías, las aristocracias en oligarquías y las democracias en sistemas demagógicos y corruptos.
→Una política corrupta no es capaz de regenerarse a sí misma.
La concentración de poder en una sóla persona es la única forma de gobierno capaz de regenerar una democracia corrompida.
→Los principios que deben inspirar la acción política del príncipe son el mantenimiento del orden social y la conservación del poder político que se le ha otorgado.
→Las virtudes que debe atesorar el príncipe son la sagacidad y la determinación.
La sagacidad lo ayudará a valorar bien las situaciones y tomar decisiones. La determinación le servirá para llevar a cabo lo que se proponga.
4. Las ideas políticas en los siglos XVII y XVIII
A partir del Renacimiento y la constitución de los estados modernos, provocó que se intensificara el interés hacia la reflexión filosófica sobre la política.
El contractualismo fue el enfoque dominante en este periodo. Este concebía la sociedad y el Estado como fruto de un pacto entre individuos que provénían de una situación previa, denominada estado de naturaleza.
No es posible describir esta situación ya que no existe, así que quienes reflexionaron sobre la misma ensayaron descripciones teóricas imaginativas sobre cómo habría sido un estado de naturaleza. De las descripciones que expusieron, se derivan una serie de consecuencias que determinan el pacto que debería ser el fundamento del Estado.
4.1. El contrato de sumisión: Thomas Hobbes
Para Thomas Hobbes, los S.H. En estado de naturaleza son seres egoístas y despiadados que buscan exclusivamente satisfacer sus propios intereses sin reparar en los demás.
Antes de la sociedad la vida humana era una guerra sin cuartel, este modo de vida sería insoportable porque los peligros acechan por todas partes.
La sociedad se presenta como solución frente a un estado de guerra total, para Hobbes el diseño del Estado deberá anticiparse de las dificultades para poder evitarlas antes incluso que se produzcan. La sociedad debe proporcionar a quienes se integren en ella seguridad, orden y protección, que no cuentan en el estado de naturaleza. A cambio, los miembros tienen que ceder los derechos y libertades que contaban en la naturaleza.
El pacto social propuesto por Hobbes surge de un intercambio de derechos por seguridad.
Para que éste tenga éxito, es necesario elegir a un miembro para que administre los derechos y las libertades según su criterio.
Con el poder concedido sobre ese miembro, podrá tomar decisiones para garantizar el orden y la seguridad.
La teoría de Hobbes respalda claramente al absolutismo monárquico.
4.2. El contrato liberal: John Locke
Para Locke, en el estado de la naturaleza los S.H. Se guiaban exclusivamente por la razón.
Gracias al razonamiento, descubrimos leyes morales naturales(las únicas que se deben obedecer), que nos conceden una serie de derechos, como el derecho a la vida, a la libertad, a la propiedad…
Los problemas surgen porque cada uno tiene que proteger sus derechos, pudiendo generar conflictos.
El Estado que nace del pacto que Locke propone tiene como única finalidad instituir una instancia superior que resuelva las situaciones que planteen conflictos entre los derechos y las libertades de cada uno. En este pacto, a diferencia con el de Hobbes, los ciudadanos no ceden sus derechos sino que los conservan.
Sólo hay un derecho natural cedido a la sociedad:
Defender individualmente nuestros derechos y libertades
Locke afirmó que los ciudadanos deben conservar el derecho a rebelarse contra el Estado, siempre que éste no cumpla con sus obligaciones y funciones.4.3. El contrato social: Jean-Jacques Rousseau
Para Rousseau, el S.H. Pre-sociedad era un buen salvaje que vivía conforme a sus sentimientos y sus instintos naturales.
Si comparamos estos estados de la naturaleza con el estado social actual, se hablaría de un retroceso más que de un progreso. El origen de este retroceso para Rousseau es la instauración de la propiedad privada, que condujo a la institucionalización de la desigualdad.
La solución era una refundación de la sociedad sobre unas nuevas bases. El contrato social que Rousseau propone se apoya en 2 pilares fundamentales:
→La determinación y definición de lo que se considere el bien común compartido por todos los miembros de la sociedad y que resulte del visto bueno de todos los intereses particulares.
→La constitución de una voluntad general que nazca del vínculo social que se genera al compartir el objetivo de alcanzar el bien común.
La voluntad general es el resultado de un pacto entre iguales y, en ningún caso, puede hacerlos desiguales. No se trata de una cesión de derechos y libertades, como la que plantea Hobbes.
En el contrato social de Rousseau, no hay sometimiento de unos individuos a otros.
Tampoco se trata de renunciar a parte de los derechos que uno tiene, a cambio de conservar su individualidad, como había defendido Locke.
Éste contrato implica una auténtica transformación de cada individuo que deja atrás a quien era para convertirse en un miembro activo de la sociedad.
4.4. Montesquieu y el espíritu de las leyes
Montesquieu renuncia buscar una forma perfecta a priori de organización social, por tanto, desde una posición cercana al Realismo político, piensa que existían muchos factores que influyen en cada sociedad de distinta forma. Para Montesquieu, el único principio que se debe de respetar es la libertad política, tratando de disfrutar del derecho a hacer todo lo que permiten las leyes.
Para garantizar el disfrute, Montesquieu considera identificar los tipos de poder que existen en un Estado. Montesquieu distinguíó 3 poderes del estado:
→El poder legislativo (el poder de hacer leyes).
→El poder ejecutivo (el poder de gobernar conforme a las leyes).
→El poder judicial (el poder de juzgar el cumplimiento o incumplimiento de las leyes).
4.5. La paz perpetua de Kant
El interés de Kant se centró en señalar hacía dónde debe encaminarse una sociedad para mejorar las condiciones de vida de aquellos que la conforman.
Kant sosténía que en toda sociedad se debe respetar la libertad individual, reconocer los derechos de los ciudadanos y resolver pacíficamente los conflictos que puedan surgir. Para lograr este objetivo, propuso las siguientes medidas:
→Llevar un proceso de ilustración, en búsqueda de proporcionar a los adultos la capacidad de usar la razón para que tomen decisiones sin capacidad de ser guiadas por terceros.
→Garantizar la consideración de ciudadanos libres de todos aquellos que hacen un buen uso de la razón y respetan las leyes morales y civiles.
→Constituir una comunidad política regida por leyes que encuentren su fundamento único en la razón y no en la costumbre y el miedo.
→Crear una federación de estados libres y soberanos, buscando el respeto mutuo y alejarse del peligro de la guerra entre naciones.
5. Ideas políticas en los siglos XIX y XX
El pensamiento político contemporáneo se caracteriza por la confrontación pero coinciden en que el fundamento de ese orden debe de ser la economía.
Se trata del capitalismo y del socialismo.
5.1. Los fundamentos filosóficos del capitalismo
El apoyo filosófico al capitalismo provino de los defensores del liberalismo.
Esta corriente surgíó como rebelión contra el absolutismo monárquico, teniendo como bandera la defensa de las libertades individuales. Los defensores del capitalismo en el Siglo XIX, añadieron la reivindicación de la libertad económica.
El liberalismo económico defiende la no interferencia del Estado en los asuntos económicos. Para ellos, dejar que el mercado se autorregule es la mejor forma de asegurar un crecimiento económico.
Los principales defensores del liberalismo económico fueron Adam Smith, David Ricardo y John Stuart Mill.
→Adam Smith fue el más radical en la defensa total de la libertad de mercado y la ausencia de barreras para el comercio. Para Smith, el orden natural es perfecto y los S.H. Tenemos tendencias naturales que nos empujan hacia la defensa de los intereses propios y hacia la competencia con los cercanos. Una sociedad que no interfiera en la libre expresión de las tendencias logrará el máximo beneficio, pero una intervención del Estado influirá negativamente en el equilibrio natural autónomo del mismo.
→David Ricardo propuso la teoría del valor de las mercancías en un mercado libre. Según esta, el valor se determina por la cantidad de trabajo invertido en su producción. Aunque Ricardo no los sabía, esta teoría supone una crítica al capitalismo, ya que si los trabajadores mediante su trabajo son los que aportan el valor a los productos, los capitalistas se estarían apropiando de ese valor y abonando un salario nunca equivalente al valor de lo que producen.
→John Stuart Mill fue un defensor apasionado de la iniciativa individual como motor de la sociedad. Éste apoyó también el principio de utilidad, que busca el bienestar para el mayor número posible de personas. En consecuencia, conocedor de los desajustes capitalistas, sostuvo la necesidad de que el Estado intervenga puntualmente en el mercado para corregir las desigualdades inevitables.
5.2. Los fundamentos filosóficos del socialismo
Karl Marx es el padre del socialismo científico del Siglo XIX. Según Marx, la economía es el fundamento último de toda organización social.
Marx sostiene que las distintas formas de organización de la sociedad que han existido hasta ahora se han edificado sobre la división social en clases y esto ha generado la lucha entre ellas.
En la edad esclavista, se enfrentaban los amos y esclavos, en la Edad Media eran nobleza y clero por un lado y vasallos y siervos por la otra, finalmente en la sociedad capitalista, se oponen los capitalistas a los proletarios. La sucesión de estos actos según Marx, se debe a una ley histórica que hace que cada sistema genere internamente sus contradicciones y esto conduce a que se sustituya el sistema por otro que surge del anterior.
El origen de la lucha de clases se produce con la institución de la propiedad privada, mediante la posesión de S.H. En el sistema esclavista, de la tierra en el feudal o del dinero en el capitalista. Para Marx, la institución de la propiedad privada supone la apropiación de una parte de la sociedad del trabajo que realiza la otra. Eso es lo que Marx denomina como alienación(hacer ajeno algo que antes pertenecía a uno).
La alineación económica consiste en la expropiación que sufre el trabajador de aquello que es producto de su acción productiva y transformadora. Erradicar la alineación es una tarea esencial para que el ser humano desarrolle todas sus capacidades. Esto exige promover una sociedad en la que no exista la lucha de clases, aboliendo la propiedad privada e instaurando la propiedad común. Esta propuesta implica que exista un Estado intervencionista que regule la economía, al menos hasta que se complete la abolición del Estado y la instauración de una sociedad comunista.
5.3. Liberalismo y socialismo en el Siglo XX
Tanto el capitalismo como el comunismo no tuvieron un buen funcionamiento en los inicios del Siglo XX. Se produjo un consenso sobre la necesidad de repensar las propuestas de socialismo y capitalismo en busca de un horizonte cada vez más justo. Durante el pasado siglo se produjeron intentos de ofrecer respuestas filosóficas a los nuevos retos sociales. Destacaremos la escuela de Frankfurt y Karl Popper.
Ambas doctrinas defendieron la democracia y rechazaron el totalitarismo.
→Neosocialismo (escuela de Frankfurt):
Los miembros de esta escuela (Adorno, Freud, Habernas, …)
realizaron una reflexión crítica de la sociedad. Para ellos, la Ilustración y la Revolución industrial tuvieron efectos opuestos en la sociedades occidentales:
⇨Produjeron un aumento de la productividad y la disponibilidad de bienes de consumo que hacen la vida más fácil.
⇨Facilitaron el sometimiento de la población a unas fuerzas que carecen de control. La cultura se convirtió en una industria más al servicio de ese poder.
Los neosocialistas defienden la crítica permanente de la sociedad que permita denunciar los abusos de un régimen tecnocrático e impulsar una emancipación de cada uno de sus miembros.
→Neoliberalismo (Karl Popper):
El neoliberalismo de Popper defiende la creación de sociedades abiertas donde se estimulan las libertades, se lleva a cabo un ejercicio crítico de la razón, se proponen reformas para resolver problemas y garantizan la posibilidad de criticar a los gobernantes.
Estas sociedades se oponen a las sociedades cerradas.
Estas últimas restringen la libertad al intentar parecerse a un ideal diseñado anteriormente, donde cualquier idea de modelo es desechada.
6. El pensamiento utópico
El término utopía viene del griego, y significa «un lugar que no existe». El primero en usar esta expresión en el sentido que tiene hoy en día fue el político y filósofo del S. XVI, Tomás Moro, quien escribíó una obra con ese mismo título. Una utopía recrea una sociedad ideal para que sirva de contraste con la sociedad real y así resulten más evidentes las deficiencias de esta.
6.1. Propuestas utópicas en la historia de la filosofía
La obra de Tomás Moro dio nombre a este estilo de pensamiento filosófico y de literatura filosófica, pero también existen precedentes y secuelas:
→La República
: diálogo escrito por Platón en el S.IV a.C. En él diseña una sociedad justa que se divide en 3 grupos sociales que se encargan de asumir las tareas necesarias para que la sociedad funcione: productores (producción de bienes materiales), guardianes (defensa) y gobernantes (gobierno). El pertenecer a un grupo en especial se basaba en las habilidades naturales del sujeto que debían ser cultivadas con la educación. Platón sosténía que debían gobernar los filósofos ya que conocían los valores que debían imperar en la sociedad.
→La ciudad de Dios:
Obra de san Agustín(S.V d.C.). En ella, desde una perspectiva cristiana, distingue claramente 2 concepciones de la sociedad: una formada por quienes aman a Dios hasta el desprecio de sí mismos y la otra, por quienes se aman a sí mismos hasta el desprecio de Dios. La primera es la ciudad de Dios, de inspiración cristiana y que es según este autor la que debe orientar a quienes tienen que organizar las sociedades reales. La segunda es una ciudad pagana contaminada por el pecado y que se presenta como modelo negativo del que hay que alejarse.
→Utopía
:
Tomás Moro comienza ocupándose de los problemas que aquejaban a la política de la Inglaterra de su época. Posteriormente, describe una isla imaginaria llamada Utopía en donde habría una sociedad perfecta. La clave se encuentra en la abolición de la propiedad privada que Moro considera el origen de todos los males.
→La ciudad del Sol
:
Tomás Campanella(principios del S.XVI) describe una sociedad que recuerda, en parte, a la de San Agustín y, en parte, a la de Moro. Propone una organización teocrática, como lo era la ciudad de Dios, pero en la que se renuncie a la propiedad privada y se defienda una especie de comunismo ideal, similar a la Utopía de Moro.
→La nueva Atlántida:
Francis Bacón(1626) presenta la particularidad de hacer vincular la perfección de esa sociedad ideal con la correcta utilización de los avances científicos.
En el S.XIX, el pensamiento utópico abandonó el estilo literario y se centró en la implantación efectiva de una sociedad ideal. A esta época pertenecen los socialismos utópicos de Pierre de Saint-Simón, Charles Fourier y Robert Owen.
Todos ellos comparten la preocupación por la correcta distribución de la riqueza que se generó gracias a la Revolución Industrial.
6.2. Las utopías negativas
Durante la segunda mitad del S.XIX y primera del XX, el pensamiento utópico recibíó una dura crítica desde dos frentes:
→Karl Marx cuestiónó el socialismo utópico porque, a su juicio, servía a los intereses burgueses actuando como freno de una praxis revolucionaria que debería conducir a una profunda transformación social que culminara en la sociedad comunista.
→Karl Popper, desde posiciones liberales, atacó las propuestas utópicas porque, según él, el modelo de sociedad que presentan está exento de crítica y pretenden conseguir que ésta se encamine hacia un ideal cuya eficacia no ha sido probada. Popper propone que el debate libre y democrático Oriente la acción política.
Como consecuencia de estas críticas, se produjo un cambio de estrategia en quienes veían en las utopías un instrumento útil para la reflexión política. Se dejaron de proponer sociedades perfectas como modelos a imitar. En su lugar, se propondrán proyecciones de futuro de la sociedad actual que muestren las consecuencias desastrosas que puede ocasionar persistir en los errores que se están cometiendo en la actualidad. A este tipo de propuestas se las llama utopías negativas.