PALABRA FILOSOFÍA.
Se define como amor al saber.
La palabra filo es masculino de filia, que significa amistad: entre dioses y mortales, entre ciudades, entre animales..Con ella se componen palabras como filo-biblos (amante de los libros), o filo-paidos( que ama a los niños), o filo-storia, que desea conocer cosas. Sin embargo, el término filo-sofía surge en Sócrates y Platón como contraste al de sofista, al que ya sabe, y por eso puede permitirse el lujo de dar su saber a otros.
FILÓSOFO
La palabra filósofo señala esa aspiración a un saber cuyo fin práctico pretende decir qué son las cosas en general, la totalidad de las cosas. Un saber, que intenta, alcanzar la verdad: la verdad de las cosas en general. Un conocimiento de lo que es.
MITO Y FILOSOFÍA
Se distingue de los mitos. Estos surgen como respuestas tradicionales a la existencia de las cosas. El mito explica, el mundo, su orden y origen. Así, por ejemplo, la existencia del mal o de la muerte resulta explicable en términos míticos. La historia de Pandora o la de Eva y la serpiente son explicaciones míticas del origen del mal.
Pero el filósofo no se conforma con narraciones que expliquen las cosas apelando a los dioses y a nuestra memoria, no apela al saber de la tradición, atribuido, de esa forma, a los dioses, sino a los argumentos que encuentra la indagación del propio logos(lenguaje, palabra, argumento..), del propio decir, que sin embargo puede ser contestada, puesta a prueba, discutida, que se urde inevitablemente ya en el diá-
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ORIGEN DE LA FILOSOFÍA EN MILETO
Según la atribución entre los historiadores, la filosofía, surge en las costas jonias de Grecia, en la ciudad de Mileto, a principios del siglo VI a.N.E., bajo una comunidad próspera, sin demasiada presión religiosa, con un fluido contacto comercial y de ideas con el mundo que la rodea, esencialmente Egipto, Persia y Mesopotamia y las ciudades griegas de la metrópoli. No mirar a los dioses para dar cuenta de las cosas, de los problemas, sino al espacio que deja su ausencia, la fisis, será la novedad que aporte la filosofía, llamada física por Aristóteles, en sus primeros pasos. Un saber que no obedece a otro dictado que al que desde sus propios problemas e interrogantes va surgiendo. Que nace en el mundo de las polis griegas, habituado a la discusión, a luchar políticamente a través de la palabra, a poder someter, por ello, todo a
crítica, a negación. La filosofía será, desde esta perspectiva, democrática, pues no recurre a autoridad alguna para imponer sus conceptos, sino a la sutileza de la reflexión, del argumento, del análisis, de los conceptos(logos).
La filosofía en sentido estricto comienza en Jonia, la parte de Grecia culturalmente abierta que practicaba el comercio y fundaba ciudades coloniales. Su origen se sitúa en las ciudades de Asía Menor como Mileto, Colofón y Éfeso, en islas como Samos y en la Grecia colonial, en el sur de Italia. Los primeros pensadores, a los que los filósofos posteriores vuelven una y otra vez, no son sólo filósofos sino también naturalistas y, además, «sabios», es decir, consejeros de los políticos y del pueblo y, en particular, notables maestros de la lengua. Dado que Sócrates constituye un hito importante, los filósofos anteriores a él—de Tales a Demócrito y los sofistas—se llaman presocráticos.Los principales conceptos de los primeros filósofos son los de «physis», ‘naturaleza’, «arché», ‘principio’, «logos», ‘concepto y argumento’, ‘orden’, ‘razón’ y ‘lengua’, y «kosmos», el mundo ordenado y reconocible en su orden, además de hermoso. En estos cuatro conceptos se perfila la importancia de los presocráticos en la historia universal. Los presocráticos descubren que debemos considerar el mundo presente como un todo (physis) dotado de un orden (kosmos) reconocible (logos) pero que no se halla en la superficie (archē) y cuyo conocimiento está expuesto a la amenaza del error. «
SABER RACIONAL.
El «saber racional« es aquel que da razón de sí, que no es porque sí, sino «por algo», recurriendo por esto al refugio de la tradición, de la fe, de la mera autoridad de del tópico, del lugar común, sino a sus propio «proceso argumental», y por esto, expuesto a ser rebatido, combatido, enfrentado a otros argumentos más sólidos, discutido.
Propio, así, del saber racional el debate, el confrontarse con otra razones que pueden resultar más adecuadas y poderosas, por lo que cambiar o modificar su trama de argumentos es parte de su ser mismo. Esto explica, en alguna medida, el hecho de que la filosofía, igual que la ciencia, tenga una historia en la que las ideas se modifican, se transforman, se abandonan, se refinan, se descubren nuevas.
Diccionario Ferrater Mora: » El saber requiere ciertos elementos: tendencia a una objetivación y universalización de lo sabido, actitud crítica, interrogación..
Es una aprehensión(captación) de la realidad por medio de la cual esta queda fijada en un sujeto , expresada, transmitida a otros sujetos, sistematizada e incorporada a una tradición(criticable y revisable).
» Según Xavier Zuviri: saber aparece primero, en Parménides, como un discernir. La realidad se ofrece como algo que parece ser algo y es otra cosa:
Saber discernir distingue primero entre el parecer y el ser. Ese saber proporciona un juicio sobre el ser verdadero y lo enuncia, mediante el logos(lenguaje)…» «En segundo lugar, el saber es, como se advierte en Platón, un definir: no es solo distinguir entre lo que es y lo que parece, sino que es averiguación de aquello en lo que consiste lo que es….· «En tercer lugar el saber es, como indicó Aristóteles, un conocer por qué, entender y demostrar”.