res cogitans. Sé que existo, pero sólo en la medida en que pienso. Al mismo tiempo, dudo de que exista mi cuerpo.
De lo único que estoy cierto es que yo pienso. Si dudo de mi cuerpo no puede ser lo mismo que mi pensamiento: que no dudo. Por lo tanto, pensamiento y cuerpo son pensados como cosas distintas. El pensamiento es distinto del cuerpo. Existe el pensamiento aunque no exista el cuerpo. El pensamiento no necesita del cuerpo para existir. Por tanto, el pensamiento es sustancia. Esto se denomina Seguir leyendo “Problema de dios en descartes” »