Tomás de Aquino: La Síntesis entre el Helenismo y el Cristianismo

El Encuentro del Helenismo y el Cristianismo

Las conquistas de Alejandro Magno representaron el triunfo del imperialismo y la destrucción de la polis, así como el olvido del aristotelismo. Al destruirse las polis, los ciudadanos dejaron de tener un ámbito de referencia hacia lo público, y la ética se convirtió en una ética individualista. La búsqueda de la felicidad se tornó en una búsqueda individual. En este momento, aparecen el epicureísmo, el estoicismo y el escepticismo.

El helenismo se encuentra con el cristianismo. El aristotelismo se había olvidado debido a las conquistas de Alejandro Magno y al descubrimiento de las filosofías platónicas de manos del neoplatonismo. El encuentro del cristianismo con el helenismo supone el encuentro con la cultura que va a determinar toda la historia occidental. La fe cristiana y la institución serán el centro del cual girará toda la Edad Media, pero antes de que esto suceda se dará un encuentro entre fe y razón. Existieron cuatro acontecimientos históricos que nos hacen entender las relaciones entre fe y razón:

• Pablo de Tarso, quien habló a los filósofos para decirles que el dios trascendente del que hablan es el Dios del cristianismo.
• Justino, quien traza una relación entre razón y fe al insistir en Dios como sabiduría.
• El cristianismo comenzó a ser perseguido en tiempos del Imperio Romano.
• El momento en el que el cristianismo es declarado religión oficial del Imperio Romano.

La aparición de las tesis de los grandes filósofos como Agustín de Hipona y Anselmo de Canterbury sentó las bases para la filosofía medieval.

Vías para la Demostración de la Existencia de Dios

Tomás de Aquino rechaza el argumento ontológico y sus vías comienzan por la observación de rasgos del mundo que se encuentran en la existencia. Dado que la fe afirma que Dios creó el mundo, se razona que en las personas podemos encontrar alguna prueba de su existencia:

• Vía del movimiento: Relacionada con la física aristotélica, los sentidos nos muestran la existencia del movimiento. Todo lo que se mueve es movido por otro. El movimiento es el paso de la potencia al acto. Resumiendo todo esto, diremos que tenemos que llegar al primer motor que nadie mueve, pero que mueve a todos: el primer motor inmóvil, Dios.
• Vía por las causas eficientes: En el mundo sensible existe un orden de causas eficientes. No es posible que algo sea causa eficiente de sí mismo, y por lo tanto es necesario admitir la existencia de una causa eficiente, Dios.
• Vía por la contingencia: La experiencia nos muestra que las cosas pueden o no existir. Es imposible que algo que está sometido a la posibilidad de no existir, exista siempre. Por eso tiene que existir un ser absolutamente necesario, cuya causa de su existencia no dependa de otro sino de sí mismo, Dios.
• Vía por los diferentes grados de perfección: Relacionado con las ideas de Platón, los valores se dan en las cosas en cuanto se aproximan más o menos a lo máximo. La perfección que encontramos en los seres no puede tener su origen en algo menos perfecto. Luego hay algo en todos los seres que es causa de su existir y de cualquier perfección, Dios.
• Vía por el orden del mundo: Vemos que hay cosas que no tienen conocimiento, como los cuerpos naturales, y que obran por un fin. Pero las cosas que no tienen conocimiento no tienden al fin sin ser dirigidos por alguien con conocimiento e inteligencia. Por lo tanto, hay un ser inteligente por el que todas las cosas son dirigidas al fin, Dios.

Vías para Demostrar la Esencia de Dios

Estas son tan perfectas como las que demuestran su existencia:

• Vía de la negación: De Dios solo podemos decir lo que no es.
• Vía de la eminencia: De cualquier cualidad solo se puede decir que Dios lo es más.
• Vía de la afirmación: Dios es el ser que más es.

Ética

Ética teológica: Los actos del hombre son libres y proceden de la voluntad. El objetivo de la voluntad es el bien supremo.

Ética basada en la ley natural: La ley natural del hombre está basada en la tendencia a conservar su existencia, a procrear y educar a los hijos, a conocer la verdad y vivir en sociedad.

Ética para todo ser humano: Propone que una ley será natural si: es universal, si es inmutable, si es evidente.

Ética orientada por la ley positiva: Para esta, la ley positiva es exigencia, prolongación y respeto.

Ética transcendental: Ya que parte de Dios y se orienta a Él, el último fin de la felicidad humana es el conocimiento beatífico de Dios.

Política

Para Tomás de Aquino, el gobierno divino del mundo es la providencia, a la que están sometidas todas las cosas, incluso el hombre. La presencia del mal en el mundo se debe al libre albedrio del hombre. El mal es solo falta de bien y puede ser de dos tipos: pena (deficiencia de la forma necesaria para la integridad de las cosas) y culpa (deficiencia de una acción que no ha sido realizable).

Tanto la ética como la política están basadas en la filosofía aristotélica, pero con un complemento teológico.

Comparaciones con otros filósofos

Aristóteles

Ambos coinciden en que hay dos tipos de conocimientos: el sensible y el intelectual; en la negación del mundo de las ideas; y en que el conocimiento se adquiere poco a poco. Tomás acepta la teoría de potencia y acto, la teoría de sustancia y accidente, la teoría de materia y forma, y la teoría de las cuatro causas de Aristóteles. Tomás estaba convencido de que la filosofía aristotélica era totalmente compatible con la fe cristiana.

Platón

Tomás no aceptaba la propuesta de Platón, según la cual las ideas son innatas en cada uno. Para Tomás, las ideas se obtienen por abstracción. Tomás negó la existencia del mundo de las Ideas, por lo que no existe la Idea de Bien.