El utilitarismo, a menudo asociado con figuras como Joseph Paul Goebbels y Hitler (aunque su aplicación es controvertida en este contexto), se centra en la idea de que las acciones deben ser juzgadas por su utilidad. El capitalismo, en su esencia, busca la eficiencia y el buen funcionamiento, ya que la guerra interrumpe la producción. Como señalaba Vives y otros pensadores, las guerras son perjudiciales para la economía y, por ende, para la burguesía y el individuo racional.
Guëll, en Barcelona, diseñó una especie de colmena, la colonia Guëll, donde los trabajadores tenían acceso a todos los servicios necesarios para su bienestar.
Autores como Adam Smith y Benjamin Franklin (Siglo XVIII) enfatizaron la idea de que «el tiempo es oro», promoviendo una visión donde todo debe tener una finalidad práctica. No se valora la acción por sí misma, sino por el provecho que se pueda obtener de ella. Sin embargo, se advierte que buscar provecho en todo puede ser contraproducente. Hume también influyó en esta corriente de pensamiento.
El Utilitarismo de Jeremy Bentham
Estos autores del siglo XVIII influyeron en la obra de Jeremy Bentham, fundador del utilitarismo. Bentham propuso el principio de utilidad, que busca la mayor felicidad para el mayor número de personas, estableciendo un criterio ético en el orden social. A nivel individual, cada persona debe buscar su propia fuente de placer o felicidad. Sin embargo, a nivel social, se debe aplicar el principio de utilidad para maximizar la felicidad colectiva. Esto plantea un problema político: las consecuencias de las acciones, especialmente en el ámbito económico.
El utilitarismo tiene sentido dentro de ciertos límites, respetando reglas que no deben ser infringidas. Estas reglas son criterios objetivos que preservan valores importantes. Por ejemplo, la esclavitud va en contra de la dignidad humana, y en este caso, el utilitarismo debe detenerse.
La Diferencia entre Derecho y Moral
La diferencia entre derecho y moral:
- El derecho se ocupa de los deberes externos, sin importar la intención con la que se cumplan (excepto en el derecho penal, donde la intención dolosa es relevante). En el derecho civil, la buena fe es un factor, pero no es determinante. Como decía Kant, al derecho le importa que se cumpla la ley, independientemente de las motivaciones. Esta distinción es más clara en el derecho interno, ya que la frontera entre moral y norma se diluye en el ámbito internacional.
- La moral se ocupa de los deberes internos, es decir, que una acción debe cumplirse por convicción interna y no por coacción externa.
La Dualidad Humana y la Necesidad del Derecho
¿Por qué es necesaria esta dualidad derecho-moral para Kant? Porque el ser humano es una dualidad. Si el hombre fuera pura racionalidad (noumen), el derecho no sería necesario. El derecho es necesario para reprimir las pasiones y mantener el orden racional. El hombre debería actuar por sí mismo, pero como no lo hace, es necesario establecer un derecho que sea razonable. Esta es la insociable sociabilidad humana: somos sociables pero también buscamos nuestros propios intereses egoístas.
El Estado de Derecho según Kant
El derecho consiste en armonizar las voluntades libres según la razón. Solo el Estado de derecho coordina las libertades de todos. Para Kant, el Estado de derecho es aquel que protege el derecho, utilizando el aparato coactivo al servicio de este. El derecho, a su vez, está al servicio de los derechos subjetivos, que Kant denomina derechos privados, como privativos de las personas. Estos derechos serían una especie de derecho natural, aunque no los denomina así.
El derecho público es el derecho positivo, que asegura los derechos privativos de las personas. Esta idea es similar a la de Locke, pero mientras que Locke la aborda desde el empirismo, Kant lo hace desde el racionalismo.
La Razón y el Estado
Constituir el estado es una exigencia de la razón, para evitar el triunfo de las pasiones. Por lo tanto, es una exigencia moral y ética. La razón no solo prescribe a los hombres salir del estado de naturaleza para entrar en el estado político, sino que también prescribe la creación de una «federación universal de naciones» para evitar que los estados actúen de manera egoísta, obedeciendo a intereses particulares.